L D (EFE) Alex marcó el último lanzamiento y sentenció el partido luego de que el portero Julio César interceptó el remate del ariete uruguayo Vicente Sánchez. Brasil completó los lanzamientos con Luisao, Luis Fabiano, Adriano y Renato.
La clasificación fue un premio al gran oficio del equipo de Carlos Alberto Parreira, que comenzó perdiendo con un gol de Marcelo Sosa, empató en el comienzo del segundo tiempo con un fulminante remate de Adriano, sólido goleador del torneo, con seis dianas, y superó las deficiencias del primer tiempo con marca y velocidad por las puntas. Brasil enfrentará a la selección de Argentina, este domingo en la final de la cuadragésima primera edición de la Copa América,
Cuatro minutos iniciales de presión endemoniada sobre la portería de Julio César fueron rotos a pedazos con un explosivo contragolpe de Adriano por la derecha, que dejó el balón a Kleberson para quemar con un remate seco las manos de Sebastián Viera. La gran virtud de Uruguay en casi todo el partido fue agrandar la cancha a los brasileños cuando tomaban el balón y achicar para sí las dimensiones de la misma al momento de partir al ataque.
Los brasileños debieron correr más para llegar a la portería de Viera y retomar posiciones de vuelta ante el desdoblamiento rápido, generalmente desde el centro a través de Sosa, o por las bandas con Carlos Diogo y Cristian Rodríguez. Los de Jorge Fossati saltaron con dos rocosas líneas defensivas de cuatro hombres, una en el fondo y otra en la mitad, que ahogaron literalmente a Alex, Adriano y Luis Fabiano.
Además del serio cortocircuito ofensivo, Brasil sufrió en defensa una gran fisura en su corredor derecho, por la impotencia de Maicon para controlar el pasaje raudo de Carlos Bueno, y la contención en la mitad fue burlada por "el Pato" Sosa con su buen manejo de balón y rápidos cambios de frente. Lo imposible apareció en el cabalístico minuto 13, cuando un remate seco de Diogo desde la derecha que iba camino al fondo de la portería vacía encontró en su trayectoria la bota de su compañero Darío Silva. Si la intención del jugador del Sevilla fue ayudar a entrar el balón, el infortunio quiso que el mismo explotara en el horizontal.
El premio para los uruguayos llegó a los 22 minutos, cuando Javier Delgado ejecutó un tiro largo desde la izquierda al centro del área que con entera libertad el centrocampista Marcelo Sosa aprovechó para empujar de cabeza con una zambullida. Sobre los 43 minutos la cuenta pudo aumentar con un remate largo de Delgado exigió a Julio César con un vuelo acrobático al segundo palo para desviar el balón hacia la línea final. Pero el gran trabajo colectivo de Uruguay pudo irse por la borda a los 45 minutos con un remate de Edu fuera del área que Viera sacó con los dedos al tiro de esquina.
Pero en los primeros segundos del segundo tiempo, un jugada de Luis Fabiano por la derecha atrajo en masa a la defensa uruguaya y permitió a Adriano soltar un tiro venenoso que entró dando rebotes. A diferencia del primer tiempo, donde sus arietes jugaron prácticamente por el centro, en el epílogo Adriano y Luis Fabiano circularon recostados en las bandas, lo que dejó en evidencia la lentitud de los corpulentos Pablo Montero y Joe Bizera, y abrió una ventana de respiro para Alex.
Por esa vía el medio de enganche brasileño hizo su primer remate serio, a los 55 minutos, que Viera contuvo con un vuelo sobre su ángulo derecho. Dos minutos después el jugador del Fenerbahce turco dejó en el camino a tres zagueros y de nuevo probó los reflejos del meta uruguayo. Los laterales Maicon y Gustvo Nery soltaron las amarras de la marca y con sus desplazamientos al frente ataron la salida desde el centro de la cancha de Diego Pérez y Cristian Rodríguez. El ingreso de Diego Forlán en el puesto de Bueno restó velocidad a Uruguay pero le garantizó pausa y peligro con los remates de media distancia. El delantero Vicente Sánchez tomó enseguida el bastón de Cristian Rodríguez para jugar al lado de Silva bajo la batuta de Forlán, el jugador del Manchester United inglés. Carlos Alberto Parreira respondió con la promoción de Diego y Julio Baptista en las plazas de Kleberson y Edu, lo que dio al partido un constante trámite de ida y vuelta.
Pudo cualquiera llevarse el triunfo. Julio Baptista con un remate que Viera sacó con los pies y Maicon en un globito que nadie alcanzó y pasó cerca del vertical, o con los contragolpes del trío Forlán-Silva-Sánchez que encontraron despoblada la defensa brasileña.
FICHA TÉCNICA:
Brasil 1: Julio César; Maicon, Luisao, Juan, Gustavo Nery; Renato, Kleberson (Diego, m.75), Edú (Julio Baptista, m.75), Alex; Luis Fabiano y Adriano. Director técnico: Carlos Alberto Parreira.
Uruguay 1: Sebastián Vieira; Carlos Diogo, Joe Bizera, Paolo Montero, Darío Rodríguez; Diego Pérez (Omar Pouso, m.81), Marcelo Sosa, Javier Delgado, Cristian Rodríguez (Vicente Sánchez, m.70); Carlos Bueno (Diego Forlán, m.62) y Darío Silva. Director técnico: Jorge Fossati
Gol: 0-1, m.22: Sosa. 1-1, m.46: Adriano.
Tanda de penaltis: Por Brasil marcaron Luisao, Luis Fabiano, Adriano, Renato y Alex.
El portero Julio César contuvo el remate de Vicente Sánchez y por Uruguay marcaron antes Silva, Vieira y Pouso.
Árbitro: El mexicano Marco Rodríguez amonestó a Baptista y Delgado.