LD (EFE) El Santander, que tenía prevista la presentación de resultados para el próximo miércoles, adelantó por sorpresa estas cifras precisamente cuando ha anunciado el acuerdo de compra de la entidad británica Abbey, que hará pública a lo largo de la mañana.
Los resultados del primer semestre estuvieron muy influidos por el ingreso de 359 millones de euros de plusvalías extraordinarias, aunque sin ellas, el beneficio neto hubiera tenido también un crecimiento importante, del 20 por ciento, gracias al aumento de los ingresos y a la contención de costes.
La venta del 0,46 por ciento de Vodafone le reportó unas ganancias de 241 millones de euros, y del 4 por ciento de Shinsei Bank, otros 118 millones. El Santander explicó que "tenía previsto destinar estas plusvalías a un fondo pendiente de asignación, pero la necesidad de presentar cuentas auditadas a cierre del semestre debido a la oferta sobre Abbey obliga a que sean afloradas en el beneficio de este semestre".
En todo caso, concreta que durante el segundo semestre, estos 359 millones de euros se destinarán a provisiones voluntarias para fortalecer el balance del grupo. Además de estos resultados extraordinarios, las cuentas del Santander muestran un crecimiento en todos los márgenes, gracias al crecimiento de la actividad y del mantenimiento del control de costes.
El margen de intermediación –diferencia entre ingresos por créditos y costes por depósitos– creció el 9,7 por ciento, hasta 4.310 millones de euros; el ordinario –que incluye comisiones y operaciones financieras–, el 7,1 por ciento, hasta 7.026 millones, y el de explotación o típico bancario, el 12,7 por ciento, hasta 3.268 millones.
Los ingresos por comisiones alcanzaron los 2.280,7 millones de euros, el 11,5 por ciento más, lo que permitió al banco contrarrestar el descenso del 25,4 por ciento del resultado por operaciones financieras, que se situó al cierre del semestre en los 435,3 millones. El Santander destaca que los costes de explotación siguieron controlados y sólo crecieron el 2,7 por ciento, con lo que su ratio de eficiencia -relación entre ingresos y gastos- mejoró 1,8 puntos en relación al primer semestre de 2003 y se situó en el 47,1 por ciento.
El Santander considera que su negocio de banca comercial ha sido "clave" en la evolución del semestre, especialmente en Europa, donde el beneficio de este área aumentó el 22 por ciento, hasta 1.057 millones de euros por la mejora de los ingresos y unos costes planos. La inversión crediticia del Grupo Santander ascendía al cierre del mes de junio a 192.186 millones de euros, el 13,6 por ciento más, mientras que los fondos totales gestionados se elevaban a 476.955 millones, el 7,7 por ciento más.
La fuerte mejora del beneficio del Santander también se debe a las aportaciones de las empresas participadas, ya que los resultados por puesta en equivalencia alcanzaron los 235 millones de euros, algo más del doble que el año pasado, gracias a las mayores aportaciones de sociedades como Royal Bank of Scotland, Cepsa, Banque Comerciales du Maroc, Urbis y las aseguradoras del grupo.
En Latinoamérica, el Santander obtuvo un beneficio semestral de 667 millones de euros, el 4,3 por ciento menos, una variación que sería positiva en un 4,2 por ciento sin el efecto de los tipos de cambio.
La tasa de morosidad del Grupo continuó con su tendencia a la baja y se situó en el 1,29 por ciento (0,69 por ciento en España, y 3 por ciento en Latinoamérica), frente al 1,67 por ciento de un año antes.
Los resultados del primer semestre estuvieron muy influidos por el ingreso de 359 millones de euros de plusvalías extraordinarias, aunque sin ellas, el beneficio neto hubiera tenido también un crecimiento importante, del 20 por ciento, gracias al aumento de los ingresos y a la contención de costes.
La venta del 0,46 por ciento de Vodafone le reportó unas ganancias de 241 millones de euros, y del 4 por ciento de Shinsei Bank, otros 118 millones. El Santander explicó que "tenía previsto destinar estas plusvalías a un fondo pendiente de asignación, pero la necesidad de presentar cuentas auditadas a cierre del semestre debido a la oferta sobre Abbey obliga a que sean afloradas en el beneficio de este semestre".
En todo caso, concreta que durante el segundo semestre, estos 359 millones de euros se destinarán a provisiones voluntarias para fortalecer el balance del grupo. Además de estos resultados extraordinarios, las cuentas del Santander muestran un crecimiento en todos los márgenes, gracias al crecimiento de la actividad y del mantenimiento del control de costes.
El margen de intermediación –diferencia entre ingresos por créditos y costes por depósitos– creció el 9,7 por ciento, hasta 4.310 millones de euros; el ordinario –que incluye comisiones y operaciones financieras–, el 7,1 por ciento, hasta 7.026 millones, y el de explotación o típico bancario, el 12,7 por ciento, hasta 3.268 millones.
Los ingresos por comisiones alcanzaron los 2.280,7 millones de euros, el 11,5 por ciento más, lo que permitió al banco contrarrestar el descenso del 25,4 por ciento del resultado por operaciones financieras, que se situó al cierre del semestre en los 435,3 millones. El Santander destaca que los costes de explotación siguieron controlados y sólo crecieron el 2,7 por ciento, con lo que su ratio de eficiencia -relación entre ingresos y gastos- mejoró 1,8 puntos en relación al primer semestre de 2003 y se situó en el 47,1 por ciento.
El Santander considera que su negocio de banca comercial ha sido "clave" en la evolución del semestre, especialmente en Europa, donde el beneficio de este área aumentó el 22 por ciento, hasta 1.057 millones de euros por la mejora de los ingresos y unos costes planos. La inversión crediticia del Grupo Santander ascendía al cierre del mes de junio a 192.186 millones de euros, el 13,6 por ciento más, mientras que los fondos totales gestionados se elevaban a 476.955 millones, el 7,7 por ciento más.
La fuerte mejora del beneficio del Santander también se debe a las aportaciones de las empresas participadas, ya que los resultados por puesta en equivalencia alcanzaron los 235 millones de euros, algo más del doble que el año pasado, gracias a las mayores aportaciones de sociedades como Royal Bank of Scotland, Cepsa, Banque Comerciales du Maroc, Urbis y las aseguradoras del grupo.
En Latinoamérica, el Santander obtuvo un beneficio semestral de 667 millones de euros, el 4,3 por ciento menos, una variación que sería positiva en un 4,2 por ciento sin el efecto de los tipos de cambio.
La tasa de morosidad del Grupo continuó con su tendencia a la baja y se situó en el 1,29 por ciento (0,69 por ciento en España, y 3 por ciento en Latinoamérica), frente al 1,67 por ciento de un año antes.