L D (EFE) El Banco de España no aprecia variaciones en la evolución de sus principales variables macroeconómicas, que "avanzan con una notable inercia", aunque "vislumbra" los primeros síntomas de algunos cambios que, de confirmarse, "modificarían la composición del crecimiento en los próximos meses".
Sobre la demanda externa, los datos disponibles apuntan, según la entidad, a una aportación aún más negativa que en el trimestre anterior, ya que las ventas al exterior (las exportaciones) se desaceleraron mientras que las importaciones continuaron creciendo a un ritmo bastante elevado.
Dentro de la demanda nacional, el consumo final de los hogares mantuvo su fortaleza, aunque con un ritmo de crecimiento más moderado que apunta hacia una desaceleración, aunque la renta disponible de las familias, principal factor del que depende el consumo, "sigue creciendo de forma sostenida y podría superar en el 2004 el aumento registrado el año anterior".
En cuanto al gasto de las Administraciones Públicas, el Banco de España afirma que su aportación al crecimiento de la renta "estaría siendo más expansiva que en 2003", aunque la información disponible, todavía muy incompleta según la institución financiera, apunta hacia una desaceleración de este agregado.
Respecto a la inversión o formación bruta de capital fijo, el informe vaticina una nueva aceleración, que "se apoyaría principalmente en el avance de la inversión en bienes de equipo".
En lo que respecta al empleo, el Banco de España sostiene que se mantiene el dinamismo en la creación de puestos de trabajo, aunque de forma algo más atenuada, lo cual queda avalado por los recientes datos de la EPA, que muestran como la desaceleración en las tasas de variación de la población ocupada se ha extendido a todas las ramas de actividad.
Sobre la demanda externa, los datos disponibles apuntan, según la entidad, a una aportación aún más negativa que en el trimestre anterior, ya que las ventas al exterior (las exportaciones) se desaceleraron mientras que las importaciones continuaron creciendo a un ritmo bastante elevado.
Dentro de la demanda nacional, el consumo final de los hogares mantuvo su fortaleza, aunque con un ritmo de crecimiento más moderado que apunta hacia una desaceleración, aunque la renta disponible de las familias, principal factor del que depende el consumo, "sigue creciendo de forma sostenida y podría superar en el 2004 el aumento registrado el año anterior".
En cuanto al gasto de las Administraciones Públicas, el Banco de España afirma que su aportación al crecimiento de la renta "estaría siendo más expansiva que en 2003", aunque la información disponible, todavía muy incompleta según la institución financiera, apunta hacia una desaceleración de este agregado.
Respecto a la inversión o formación bruta de capital fijo, el informe vaticina una nueva aceleración, que "se apoyaría principalmente en el avance de la inversión en bienes de equipo".
En lo que respecta al empleo, el Banco de España sostiene que se mantiene el dinamismo en la creación de puestos de trabajo, aunque de forma algo más atenuada, lo cual queda avalado por los recientes datos de la EPA, que muestran como la desaceleración en las tasas de variación de la población ocupada se ha extendido a todas las ramas de actividad.
Además, el informe vaticina una desaceleración de los precios en los próximos meses, que tiene que ser de intensidad suficiente para acabar con el actual brote inflacionista. Igualmente, propone, para corregir el diferencial de inflación con la zona euro, un menor crecimiento de los costes laborales unitarios de forma que los aumentos de salarios y de productividad "discurran por sendas paralelas".
En el resto del mundo
La entidad financiera considera que el crecimiento de la economía mundial "ha tendido a generalizarse" en el 2004 y se ha extendido desde Estados Unidos y otras regiones asiáticas a los países europeos e iberoamericanos, aunque el precio del petróleo y las tensiones geopolíticas crean "alguna incertidumbre sobre la continuidad e intensidad de este proceso".
En este sentido, subraya que los datos recientes sobre la evolución de las economías en la zona euro "resultan esperanzadores" aunque no acaban de despejar las dudas sobre la firmeza que pueda alcanzar la recuperación ya que, a pesar de los bajos tipos de interés, el consumo está limitado por el reducido nivel de confianza de los consumidores y la atonía de las bolsas.
En este sentido, subraya que los datos recientes sobre la evolución de las economías en la zona euro "resultan esperanzadores" aunque no acaban de despejar las dudas sobre la firmeza que pueda alcanzar la recuperación ya que, a pesar de los bajos tipos de interés, el consumo está limitado por el reducido nivel de confianza de los consumidores y la atonía de las bolsas.