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Los terroristas de Al Sader tampoco ceden el control del mausoleo de Alí como habían anunciado

Tanques estadounidenses cercan de nuevo el mausoleo de Imán Ali, en Nayaf, donde se refugia Al Sader. Una vez más, las ofertas del jefe de los terroristas del “Ejercito del Mahdi”, son falsas y las negociaciones con el ayatolá iraní Alí Sistani para entregar el templo quedan suspendidas. El anuncio, como de costumbre, lo hace uno de los cientos de portavoces de Al Sader mientras sus leales siguen golpeando Irak con atentados terroristas.

Tanques estadounidenses cercan de nuevo el mausoleo de Imán Ali, en Nayaf, donde se refugia Al Sader. Una vez más, las ofertas del jefe de los terroristas del “Ejercito del Mahdi”, son falsas y las negociaciones con el ayatolá iraní Alí Sistani para entregar el templo quedan suspendidas. El anuncio, como de costumbre, lo hace uno de los cientos de portavoces de Al Sader mientras sus leales siguen golpeando Irak con atentados terroristas.
L D (Agencias) Mientras los portavoces de Al Sader emiten por doquier anuncios y pactos, se suceden los actos terroristas y de sabotaje por todo Irak. Los terroristas se han hecho fuertes en el mausoleo del imán Alí y retrasan la entrega que habían acordado con el ayatolá iraní Al Sistiani, máxima autoridad religiosa de los chiíes, ingresado en Londres tras una operación por su cardiopatía.
 
Parece que además, Alí Sistani quiere hacer inventario de las riquezas que se custodian en el templo y verificar si ha habido expolio antes de cerrar una negociación. Las tropas de EEUU retiraron sus posiciones en espera de la negociación pero este domingo han vuelto a tomarlas, dada la escasa credibilidad de todo lo que emana de los terroristas de Al Sader, situándose a unos 300 metros de las posiciones de los terroristas.
 
Por otro lado, las acciones terroristas se suceden en Bagdad donde este domingo al menos dos personas murieron y otras ocho resultaron heridas por la explosión de un coche-bomba en la localidad de Khalis, cerca de la ciudad de Baquba, a unos 65 kilómetros al noreste de la capital. La carga explosiva que contenía el vehículo fue detonada por el conductor, cuando se encontraba cerca de un convoy de vehículos oficiales iraquíes.

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