L D (Agencias) Según informaron a Europa Press fuentes socialistas, este borrador se divide en cuatro bloques. En el primero, analizan la amenaza que supone para España y para el resto del mundo el terrorismo islamista, mientras en el segundo capítulo analizan el comportamiento del anterior Gobierno del PP. En este apartado, los socialistas censuran la gestión de la información del Gobierno de Aznar en los días posteriores a la masacre. Además, dicen que el Ejecutivo del PP intentó convencer a la opinión pública de la autoría de ETA.
Los comisionados socialistas mantienen que el 11-S y los atentados en Casablanca en mayo de 2003 fueron dos avisos de que España podía ser objetivo terrorista, y dicen que este riesgo fue minusvalorado. Creen que no se prestó la debida atención a estas "señales" y a los informes de los servicios de Inteligencia españoles. También creen que "se bajó la guardia", y que no hay una estrategia definida contra el terrorismo islámico.
El tercer bloque del documento incluye una serie de medidas para reforzar los medios destinados a la lucha contra el terrorismo internacional, para mejorar la coordinación y para reforzar la prevención. En concreto, plantea más de una treintena de propuestas relacionadas con Interior, el Poder Judicial o el Ministerio Fiscal, incidiendo en el aumento de los medios en la lucha contra el terrorismo y el aumento de la cooperación internacional.
El PSOE también propondrá una regulación más exhaustiva relativa del tráfico y posesión de explosivos, para evitar que puedan circular de modo descontrolado por el territorio nacional, como sucedió las semanas previas al 11-M. En el último y carto bloque, el PSOE defiende la creación de un Pacto contra el Terrorismo islamista entre todas las fuerzas políticas.