La publicidad “on line” registra cifras récord en el segundo trimestre del año

(Libertad Digital) Los 2.370 millones de dólares facturados por Internet a través de la publicidad en Estados Unidos en el segundo trimestre de 2004 –concluido el 30 de junio–, suponen un aumento del 43 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior y un 6,2 por ciento si se toma como referencia el primer trimestre de este año. En el conjunto del semestre, los ingresos ascendieron a 4.600 millones de dólares, un 40 por ciento más que los 3.300 millones obtenidos en el mismo periodo de 2003, recalca el diario The Wall Street Journal.

 

Estas cifras, que recuerdan a las obtenidas en plena burbuja de los negocios en Internet –en el cuarto trimestre de 2000 la facturación alcanzó los 2.120 millones de dólares–, se diferencian respecto a las de hace cuatro años en que los banners –gráficos publicitarios que suele integrar un enlace para saltar a otra página– no son la principal fuente de inversión de las compañías anunciantes. Ahora el interés de los departamentos de marketing recae sobre la publicidad en buscadores, que atraen el 40 por ciento de los ingresos totales.

 

 

Al mismo tiempo, el informe remarca la caída de las campañas de publicidad por correo electrónico. La IAB y PwC señalan que este descenso se debe, en gran parte, a la escasa efectividad de los anuncios que emplean esta vía. Y es que, con el paso del tiempo, los usuarios equiparan los anuncios ‘legales’ con el “spam” o correos no solicitados, lo que provoca que los tiren a la papelera sin leerlos previamente.

 

A diferencia de las cifras de 2000, los expertos muestran más confianza en las cifras registradas ahora. Nate Elliott, analista de la firma estadounidense Jupiter Research, señala que los datos actuales no se corresponden con el “lunático e irracional  crecimiento de finales de los años 90”. “Estos son dólares ganados con mucho esfuerzo”, añade.

 

El peor trimestre de la publicidad en Internet se sitúa en 2002. Entonces apenas se alcanzaron los 1.450 millones de dólares. Desde entonces, las cifras no han hecho más que crecer.