La Asociación de Víctimas del 11-M no descarta denunciar si se descubre quién ha vendido las fotos
La presidenta de la Asociación de Víctimas del 11-M, Clara Escribano, percibió "mala fe" en la difusión por internet de nuevas imágenes de la tragedia, y no descartó una denuncia si se descubre quién ha podido filtrarlas y lucrarse con ellas.
L D (EFE) Escribano dijo ignorar de dónde han salido esas imágenes. Pero "desde luego, salen con muy mala fe. No nos dejan empezar nuestra vida como quisiéramos o volver a retomar nuestras vidas". "Si es una filtración de alguna persona o de algún grupo", Escribano, herida en los atentados del pasado 11 de marzo en Madrid, no descartó acudir a los tribunales. Si alguien se lucra con las imágenes, "es alguien que no tenga corazón, alguien que no vive el dolor como lo vivimos nosotros todos los días, ni como lo viven los familiares de las víctimas", lamentó, en declaraciones a EFE-TV.
Escribano aludió también a las imágenes de Atocha difundidas esta semana en España, que "han sido muy duras de ver". "Si estas imágenes (las de internet) no han sido transmitidas, deben ser todavía mucho más duras y mucho más crueles", se dolió. "¡Por favor, dejen de poner imágenes del 11 de marzo!", imploró, al tiempo que pidió: ¡que no se olvide el 11-M, pero que no nos lo recuerden con tanta crudeza".
Un total de 191 personas murieron y más de 1.500 resultaron heridas en el atentado contra cuatro trenes de cercanías presuntamente perpetrado por terroristas islámicos.
Escribano pidió "respeto" a las víctimas de esa tragedia y aseguró que ellos y sus familiares "han sufrido un retroceso bastante importante en sus tratamientos, tanto psiquiátricos como psicológicos. Es difícil hablar de ello y seguir la vida diaria".
Escribano aludió también a las imágenes de Atocha difundidas esta semana en España, que "han sido muy duras de ver". "Si estas imágenes (las de internet) no han sido transmitidas, deben ser todavía mucho más duras y mucho más crueles", se dolió. "¡Por favor, dejen de poner imágenes del 11 de marzo!", imploró, al tiempo que pidió: ¡que no se olvide el 11-M, pero que no nos lo recuerden con tanta crudeza".
Un total de 191 personas murieron y más de 1.500 resultaron heridas en el atentado contra cuatro trenes de cercanías presuntamente perpetrado por terroristas islámicos.
Escribano pidió "respeto" a las víctimas de esa tragedia y aseguró que ellos y sus familiares "han sufrido un retroceso bastante importante en sus tratamientos, tanto psiquiátricos como psicológicos. Es difícil hablar de ello y seguir la vida diaria".
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