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ANUNCIO DEL SECRETARIO DE ESTADO DE SALUD

EEUU prepara un escudo contra eventuales atentados bioterroristas

El secretario de Salud de Estados Unidos, Tommy Thompson, aseguró este domingo en París que su departamento desarrolla un "escudo para proteger a la población" de un eventual ataque bioterrorista. Thompson aseguró al diario Le Figaro que los terroristas "pueden golpearnos en todo momento" y que EEUU está estimulando "la investigación, tanto en el sector público como en el privado" para llevar a cabo esta iniciativa.

L D (EFE) El secretario de Salud estadounidense aseguró este sábado que la estrategia de su país consistirá en "desarrollar medidas contra las actividades bioterroristas", para lo que ha previsto almacenar vacunas. Thompson aseguró que EEUU ha creado "12 sitios estratégicos en los que hay almacenadas 600 toneladas de material médico y que son accesibles a menos de siete horas desde cualquier punto del territorio".

El dirigente estadounidense  también señaló que en los últimos tres años, EEUU ha pasado de tener 15 millones a 400 millones de dosis disponibles de vacunas contra la viruela. El responsable de Salud de EEUU confirmó que los países desarrollados pondrán a disposición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) un remanente de vacunas para afrontar ataques en países que no las posean.

Thompson aseguró que EEUU acaba de "poner a disposición de la OMS unas 20 millones de dosis que, una vez diluidas, podrían representar entre 80 y 100 millones de dosis utilizables en caso de ataque contra un país que no disponga de sus propias reservas". Sobre la propuesta francesa de crear una célula internacional de respuesta a un riesgo bioterrorista, Thomson afirmó que "no debe ser descartada a priori", aunque se mostró contrario a la idea de que esté situada en un país en concreto.

El secretario de salud estadounidense participó junto a sus colegas del G7 (EEUU, Canadá, Japón, Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido) y México en una cumbre en París sobre bioterrorismo. Allí, el ministro francés de Sanidad, Philippe Douste-Blazy, propuso a sus colegas la creación de un grupo de expertos internacionales dispuestos a actuar en caso de atentado químico, radiológico y bacteriológico y dijo que podría estar basado en Francia o en Canadá, que alberga los despachos del G7 sobre la salud.

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