LD (Agencias) La banda de fluctuación en que se movió el euro hasta las 15.30 horas GMT fue muy amplia y osciló entre los 1,3382 y los 1,3503 dólares. Hacia las 15.30 horas GMT la moneda única se cambiaba a 1,3493 dólares, frente a los 1,3459 dólares del mediodía. Por su parte, Banco Central Europeo (BCE) fijó el cambio oficial del euro en 1,3456 dólares.
La divisa europea se ha mantenido durante toda la semana en niveles altos, pero hasta este jueves no había registrado máximos históricos. La subida hasta los 1,3503 dólares se ha producido pocos minutos después de que el Departamento de Trabajo estadounidense hiciera públicos unos datos decepcionantes sobre la creación de empleo en la última semana.
Los pedidos semanales de indemnizaciones por desempleo en EEUU aumentaron en 17.000 hasta 330.000, en la semana que terminó el 18 de diciembre. Además, los gastos de consumo familiar en Estados Unidos aumentaron 0,2 por ciento en noviembre, respecto al mes anterior, un dato peor del esperado por los analistas.
También se publicó la subida del volumen de pedidos de bienes duraderos en noviembre, que se situó por debajo de las expectativas de los analistas. Los pedidos de bienes duraderos a las fábricas de EEUU aumentaron en un 1,6 por ciento en noviembre, el mayor incremento desde julio. Si se excluyen los bienes de transporte, que son los más caros, los pedidos de bienes duraderos bajaron un 0,8 por ciento, tras una caída del 1,3 por ciento el mes anterior.
La publicación de otras cifras macroeconómicas favorables en EEUU, como la revisión al alza del índice de confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan hasta los 97,1 puntos en diciembre, apenas pudo debilitar la actual fortaleza de la divisa comunitaria. Además, en los mercados de divisas circularon rumores de que la Administración estadounidense no frenará la actual debilidad del billete verde, desoyendo los llamamientos de autoridades políticas y económicas de Europa y Asia.
La publicación de otras cifras macroeconómicas favorables en EEUU, como la revisión al alza del índice de confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan hasta los 97,1 puntos en diciembre, apenas pudo debilitar la actual fortaleza de la divisa comunitaria. Además, en los mercados de divisas circularon rumores de que la Administración estadounidense no frenará la actual debilidad del billete verde, desoyendo los llamamientos de autoridades políticas y económicas de Europa y Asia.