L D (EFE) La 88ª edición del Giro de Italia tendrá 33 puertos de montaña y pasará por el Stelvio, de 2.758 metros de altura. El recorrido total que harán los ciclistas es casi 30 kilómetros superior al del año pasado, contará con dos jornadas de descanso y las contrarrelojes individuales serán más largas. La carrera comienza el 7 de mayo con una prólogo contrarreloj individual de 1,15 kilómetros en Regio Calabria, localidad del sur de Italia. Cerca de 3.465 kilómetros harán los ciclistas antes de la última etapa, que se disputará el 29 de mayo en Milán como viene siendo ya habitual.
Al margen del prólogo, en el calendario de la prueba hay dos crontrarrelojes más diseñadas para los especialistas. La primera es un recorrido prácticamente llano entre Lamporecchio y Florencia, de 41,500 km., y la segunda, entre Chieri y Turín (31 km.), sólo tiene el paso de Colle de Superga (620 m) como principal dificultad. Las etapas más decisivas son precisamente la llegada a Turín y la que se corre entre Savigliano y Sestriere, en la decimonovena jornada. En la capital piamontesa se recordarán los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán el año que viene en Turín.
Pese a ser un Giro más largo que el de 2004, el inicio de la prueba es menos complicado. En la primera semana, los recorridos serán largos y aptos para los velocistas. La 11ª etapa (Marostica-Zoldo Alto, de 150 km.) deberían empezar a aclararse las cosas en la clasificación. Será la primera llegada en alto (1.502 metros) tras haber pasado por otros tres puertos (Passo di Cereda, de 1.369 m.; Forcella Aurine, 1.299 m.; y Passo Duran, de 1601 m.). La carrera empezará entonces a hacerse más dura. En la 13ª etapa (Mezzocorona-Ortise/St. Ulrich, 217 km.) se sube al duro Pordoi, de 2.239 m de altura en 12,1 km de ascensión, y en la 14ª (Egna/Neumarkt-Livigno, de 210 km.) aparece el Stelvio, con una pendiente media de 10,2 y 2758 metros de altura en su punto más alto, la Cima Coppi.
Los siguientes tramos más complicados se disputarán en la 17ª y 19ª etapas. En la primera de ellas, Varazze – Limone Piamonte (199 km), el pelotón pasará por el Colle di Cadibona, el Madonna del Colletto (con un 8,25% de desnivel), el Colleto del Moro (8,9%) y el Colle di Tenda, donde acabará a 1.795 metros de altura tras 13,5 kilómetros de subida y una pendiente media del 6,1%. Más difícil todavía se presenta la 19ª etapa, en la que los corredores cubrirán 190 km entre Savigliano y Sestriere, acabando también en alto. Será la etapa reina de esta edición del Giro. Cuenta con 60 kilómetros de subida por los valles donde en 2006 se disputarán los Juegos Olímpicos de Invierno. En medio de esta etapa está el Colle delle Finestre, con 2.178 m., 18,5 km de ascensión y una pendiente media del 9,20%. Los seis últimos kilómetros de esta etapa son en un parque natural protegido, por lo que la organización se ha comprometido a cubrir el suelo con un material especial que simule asfalto. Quien termine con el maillot rosa podrá considerarse virtual vencedor del Giro 2005.
Astarloa estará; Amstrong es duda
Astarloa estará; Amstrong es duda
El Giro que se ha presentado en Milán ha sido calificado como duro teniendo en cuenta las características de los corredores italianos, incluido Cunego, vencedor en la edición anterior, que ya anunciado que tomará la salida el próximo 7 de mayo. El español Igor Astarloa también ha confirmado que correrá la carrera aunque el norteamericano Lance Amstrong, seis veces ganador del Tour de Francia, no parece muy probable que vaya a estar.