L D (EFE) Los portavoces de las asociaciones nacionales que representan a estos empresarios, CEPAS y ANEAC, aseguraron que las grúas actuarán en aquellos casos que puedan poner en peligro la seguridad del tráfico, "igual que lo han venido haciendo desde que empezó el paro", el pasado viernes.
El presidente de ANEAC, Rafael Merino, manifestó que las asociaciones regionales de grúas tienen previsto coordinarse a partir de este lunes con las correspondientes Delegaciones del Gobierno en cada comunidad, para atender "los casos de emergencia" que se pudieran derivar de la ola de frío polar. Merino añadió que las grúas de País Vasco y Asturias ya se han puesto en contacto con sus respectivas Delegaciones del Gobierno para prestar los servicios que se les requieran con carácter de urgencia.
Por su parte, el portavoz de CEPAS, Filemón Galarza, quiso transmitir un mensaje de tranquilidad a los automovilistas "para que sepan que vamos a actuar en aquellas cuestiones que afecten a la seguridad vial". Galarza sostuvo que los operadores de grúas ya han efectuado, en las tres jornadas que llevan de paro, múltiples servicios para transportar vehículos averiados o accidentados hasta lugares –arcenes o áreas de descanso– en los que no representen un peligro para el tráfico. "Esta es una guerra no contra el usuario, sino contra las aseguradoras", sentenció Galarza, quien aseguró que el paro continuará a la espera de los resultados de la reunión que el próximo martes, día 25, mantendrán los empresarios de grúas con las compañías de seguros en la sede de la patronal aseguradora, UNESPA, en Madrid.
Si la negociación con las aseguradoras fracasa en ese encuentro, los empresarios de grúas podrían plantearse la posibilidad de empezar a prestar servicios de asistencia a los usuarios, cobrando a éstos las correspondientes tarifas, tal y como hicieron en el paro que protagonizaron el pasado verano. No obstante, algunas asociaciones regionales –que se reunirán este lunes para debatir la estrategia de cara a la reunión del martes– ya se han mostrado partidarias de empezar a prestar sus servicios de forma generalizada durante la ola de frío, aunque cobrando directamente al usuario.