LD (Agencias) De los datos del informe "Consenso Económico", elaborado por la consultora y correspondiente al primer trimestre del año, se deduce que los expertos creen que el crecimiento de la riqueza nacional durante este año se verá afectado por su dependencia del petróleo y rondará al cierre del ejercicio el 2,61 por ciento. Además, el 76,2 por ciento de los encuestados calcula que la inflación se incrementará por esa misma causa entre una y tres décimas.
Una mitad de los encuestados opina que el crecimiento se situará entre el 2,1 y el 2,5 por ciento, mientras que la otra mitad prevé que aumentará entre el 2,6 y el 3 por ciento.
La consultora también interrogó a los expertos y empresarios sobre el sector de la construcción, del que dedujo que el 64,1 por ciento de los encuestados cree que existe una sobrevalorización de la vivienda, pero que se trata de un escenario sostenible; frente a otro 34,19 por ciento que cree que no lo es. Esa sobre valorización del precio de la vivienda –que se ha más que duplicado desde 1998– es cifrada por el 58,93 por ciento de los encuestados en más del 20 por ciento.
Las Cámaras advierten de la ralentización de la creación de empleo
Según las Cámaras de Comercio, el crecimiento de la economía española durante el ejercicio 2004 se situó en el 2,6 por ciento –la misma tasa que en el último trimestre del año– aunque advierten de que la creación de empleo podría moderarse en 2005 si se confirma la "ligera" suavización de la actividad. Así, esta organización considera que este año se crearán 100.000 empleos menos de los que se crearon el año pasado (400.000).
Según el Boletín de Situación Económica del cuarto trimestre, la fortaleza de la demanda interna y la construcción han sido los motores, mientras que el sector exterior mantiene su aportación negativa al crecimiento afectado por la apreciación del tipo de cambio dólar-euro y el diferencial de inflación respecto a la zona euro, lo que perjudica la competitividad de los productos españoles en el extranjero.
Dada la continua aportación negativa del sector exterior, las Cámaras consideran que es necesario acometer reformas que permitan mejorar la competitividad estructural, que depende, entre otros factores, de la innovación, de la introducción de nuevas tecnologías en las empresas y de la mayor especialización en productos de calidad media-alta.