(Libertad Digital) El artículo que este jueves firma Daniel Portero en el diario La Razón explica a la perfección todas las aristas del sumario contra HAIKA que desde el nacionalismo vasco se pretenden ocultar.
Son varias las trampas contra las que Portero alerta: la reducción de HAIKA a meros delincuentes callejeros desvinculados de la cúpula de ETA y el peligro de prevaricación que hace necesaria la presencia de observadores. Muy al contrario, el séquito que acompaña a los imputados invade la Audiencia Nacional: un equipo de 10 abogados que ha abierto despacho ex profeso para esta causa y entre los que se encuentran los habituales defensores de etarras, Iñigo Iruin y Jone Goiricelaia, y más de 150 personas entre familiares, dirigentes de la denominada izquierda abertzale, medios de comunicación afines y representantes institucionales vascos.
Pero la primera de las trampas es la reducción de HAIKA a "los chicos de la gasolina". Así, Daniel Portero, hijo de Luis Portero, asesinado por ETA en el año 2000, incide en el diseño de este término acuñado por Arzalluz para encubrir la pertenencia de esta asociación a la estructura de la banda terrorista y, por ende, materia del sumario matriz contra ETA-KAS-EKIN –instruido por Baltasar Garzón en el 18/98– que se llevará a juicio a partir de junio de este año. "La izquierda abertzale –escribe Portero en La Razón– se ha preparado jurídicamente y movilizado social y mediáticamente ante el comienzo del macrojuicio ETA S.A., en el que se juzga a 187 individuos –42 de ellos en el sumario de HAIKA– por colaborar o pertenecer a ETA a través de satélites como KAS-EKIN, BATASUNA, GESTORAS PRO AMNISTÍA, EGIN, AEK, XAKI, EGUNKARIA, HERRIKO TABERNAS, etc".
Lo que describe Portero es la realidad del entramado etarra que, detrás de esos nombres habituales en los sumarios pero ajenos a la mayoría de la ciudadanía, significa: el brazo político, la sección de apoyo a presos, el sector mediático, el paraguas del euskera y la euskaldunización, la estructura internacional y la recaudación por la vía extorsión. En suma, ETA y sus cuentas corrientes. El golpe a esta estructura supone vaciar las arcas del terrorismo, precisamente lo que casi consiguieron los gobiernos del PP. Portero lo llama acertadamente, "el holding del crimen organizado".
En cuanto a la segunda de las trampas –prevaricación, violación de derechos– es una de las armas más antiguas de ETA. En el manual que todo pistolero de la banda aprende figura la consigna de gritar la pertenencia a la banda y después denunciar torturas con todo lujo de detalles. Así lo llevan haciendo durante años. Pero el Gobierno vasco parece decidido a enviara a la Audiencia Nacional un equipo de "observadores". En este sentido, el portavoz parlamentario del PP vasco, Leopoldo Barreda, ha presentado una interpelación al lehendakari, Juan José Ibarretxe, para que aclare la intención de esta iniciativa.
Según indica en su iniciativa, recogida por la agencia Europa Press, no hay nada más "impropio" de un consejero de Justicia que adoptar esta decisión, "que supone el cuestionamiento del Poder Judicial y del normal funcionamiento del Estado de Derecho". En este sentido, agrega que es "obvio" que las garantías procesales existen sin la necesidad de la "actuación histriónica del señor Azkarraga, que de este modo adopta una vez más la letanía política de los terroristas y humilla a las víctimas".