L D (EFE) El subdelegado del Gobierno en Zamora, Carlos Hernández, explicó que en este caso han intervenido grupos especializados en delitos cibernéticos debido a que las personas que presuntamente pretendían quitarse la vida de manera conjunta contactaron entre sí a través de un foro de Internet.
Hernández agregó que estos grupos especializados del Cuerpo Nacional de Policía, no sólo prestan atención a los casos de intercambio de pornografía infantil como la red desmantelada recientemente, sino que también trabajan en la prevención de otro tipo de delitos que se pueden cometer a través de Internet. Este es el caso del foro en el que contactaron los tres detenidos, motivo por el que estos grupos especializados están en alerta para prevenir e intervenir en caso de que surjan nuevos foros en la red informática en los que se induzca al suicidio.
El subdelegado del Gobierno explicó que, aunque en un principio se había barajado la posibilidad de que los jóvenes pudieran estar relacionados con algún tipo de secta, la investigación policial finalmente descartó esta posibilidad.
Respecto a la motivación de los tres suicidas, indicó que deberán determinarla los expertos en Psiquiatría, ya que la Policía no ha encontrado una causa clara, debido a que se trataba de jóvenes con "una situación vital normal", un alto nivel educacional y, aparentemente, no tenían grandes problemas que pudieran explicar su actitud. Carlos Hernández pidió que se deje trabajar al Juzgado, que deberá ser el que ahora determine esta cuestión, a la vez que rechazó este tipo de actitudes, "con las que nada se soluciona", dijo en referencia al supuesto intento de suicidio colectivo.
Miembros del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron el pasado miércoles a los tres jóvenes, con edades comprendidas entre 26 y 29 años, dos de ellos naturales de Madrid y uno de Asturias, a los que el Juzgado de Instrucción número cinco de Zamora ha imputado un presunto delito de inducción al suicidio.
Miembros del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron el pasado miércoles a los tres jóvenes, con edades comprendidas entre 26 y 29 años, dos de ellos naturales de Madrid y uno de Asturias, a los que el Juzgado de Instrucción número cinco de Zamora ha imputado un presunto delito de inducción al suicidio.
Los jóvenes, según la investigación policial, al parecer pretendían quitarse la vida en la casa rural que alquilaron en Lober, una pequeña población zamorana de 63 habitantes. Para ello, disponían de carbón, una paellera y un medidor de monóxido de carbono que fueron intervenidos tras la detención.
La detención se produjo tras la denuncia de dos periodistas de televisión, que alertaron a la policía tras introducirse en el foro de Internet y hacerse pasar por suicidas para conocer los planes del grupo.
La detención se produjo tras la denuncia de dos periodistas de televisión, que alertaron a la policía tras introducirse en el foro de Internet y hacerse pasar por suicidas para conocer los planes del grupo.