L D (EFE) ) El líder conservador confirmó que tiene la lista de nuevos ministros preparada y señaló que el juramento del próximo Gobierno tendrá lugar, con toda probabilidad, el mismo sábado. También indicó que está trabajando en el nuevo programa de fin de legislatura que cumpla "los nuevos objetivos que la mayoría ha identificado", entre ellos "el relanzamiento de las empresas, la defensa del poder de adquisición de las familias y un plan de iniciativas concretas para el sur".
Una vez que los miembros del nuevo Gabinete hayan jurado su cargo ante el presidente, el primer ministro deberá someterse a la confianza del Parlamento, lo que probablemente ocurrirá a comienzos de la próxima semana. La crisis de Gobierno que provocó la dimisión de Berlusconi el pasado miércoles se desató a raíz de la aplastante derrota electoral sufrida por la mayoría conservadora en los comicios regionales del pasado 3 y 4 de abril, en los que el centroizquierda que lidera Romano Prodi se hizo con doce de las catorce regiones en liza.
Una vez que los miembros del nuevo Gabinete hayan jurado su cargo ante el presidente, el primer ministro deberá someterse a la confianza del Parlamento, lo que probablemente ocurrirá a comienzos de la próxima semana. La crisis de Gobierno que provocó la dimisión de Berlusconi el pasado miércoles se desató a raíz de la aplastante derrota electoral sufrida por la mayoría conservadora en los comicios regionales del pasado 3 y 4 de abril, en los que el centroizquierda que lidera Romano Prodi se hizo con doce de las catorce regiones en liza.
De forma paralela a las consultas de Ciampi, Berlusconi ha mantenido una ronda de encuentros con sus aliados políticos para poner a punto el próximo Gabinete, que según ha indicado él mismo presentará pocos cambios en relación al anterior, aunque sin ser un Ejecutivo "fotocopia". El objetivo es el de mantener una representación equilibrada de todos los partidos de la coalición del centroderecha, incluida la Liga Norte, la única que se opuso a la dimisión del primer ministro por temor a ver obstaculizada la reforma federal que debate el Parlamento.
Dado que no ha podido impedir la crisis de Gobierno, la Liga exige mantener el Ministerio para las Reformas, hasta ahora ocupado por Roberto Calderoli, algo que parece garantizado pese a las reticencias de los dos principales socios de Berlusconi, Alianza Nacional y los democristianos de la UDC. Estas dos formaciones forzaron al primer ministro a declarar la crisis para presentar una imagen renovada de la coalición, después de la aplastante derrota en las elecciones regionales del 3 y 4 de abril pasado ante la oposición del centroizquierda que lidera Romano Prodi.
Mientras se prepara para liderar el próximo Ejecutivo, Berlusconi ultima un nuevo programa para el final de la legislatura (que concluye en mayo de 2006), con prioridad a la promoción industrial, la defensa del poder adquisitivo de las familias y el impulso económico de las regiones del sur, las menos desarrolladas del país.
Dado que no ha podido impedir la crisis de Gobierno, la Liga exige mantener el Ministerio para las Reformas, hasta ahora ocupado por Roberto Calderoli, algo que parece garantizado pese a las reticencias de los dos principales socios de Berlusconi, Alianza Nacional y los democristianos de la UDC. Estas dos formaciones forzaron al primer ministro a declarar la crisis para presentar una imagen renovada de la coalición, después de la aplastante derrota en las elecciones regionales del 3 y 4 de abril pasado ante la oposición del centroizquierda que lidera Romano Prodi.
Mientras se prepara para liderar el próximo Ejecutivo, Berlusconi ultima un nuevo programa para el final de la legislatura (que concluye en mayo de 2006), con prioridad a la promoción industrial, la defensa del poder adquisitivo de las familias y el impulso económico de las regiones del sur, las menos desarrolladas del país.