L D (Agencias) El también presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial (PPGE) recalcó que viajó a Croacia para buscar "un segundo exilio" y medios para financiar su actividad política porque en España se siente "débil y desprotegido".
El líder opositor ecuatoguineano explicó que un ciudadano belga, de nombre Christian de Foix, ordenó su asesinato a mercenarios croatas, a finales de marzo en aguas del Adriático, pero negó que el Gobierno español o sus servicios de inteligencia pudieran estar detrás de dicho plan. Sin embargo, dijo que le constaba que "alguien ha hablado de esto". "(En) la investigación que se abra, si es seria, ese alguien aparecerá", valoró.
"No puedo afirmar categóricamente que el Gobierno español esté detrás de este intento de asesinato. Lo que sí puedo asegurar es que tengo información de los 'asesinos' según la cual habían recibido información directa de que los servicios secretos españoles están detrás, el Gobierno estaba detrás", reveló durante su primera comparecencia pública en Madrid tras volver de Croacia. Lo que sí quiso dejar claro es que el presidente ecuatoguineano, Obiang Nguema, estaba detrás de este intento de asesinato. "Es obvio", anotó categóricamente en respuesta a un periodista.
Reclama un encuentro con las autoridades españolas
Moto también pidió ser recibido "con absoluta urgencia" por "alguna autoridad competente" del Gobierno socialista: un alto funcionario de los Ministerios de Interior, Justicia o de Asuntos Exteriores y de Cooperación. En este sentido, anotó que no quería crear "ningún problema" al Ejecutivo español: "No peleamos contra España, no somos un estorbo. Ojalá España fuera desde los comienzos el principal motor de la actividad económica petrolífera de Guinea. Si Severo Moto fuera presidente de Guinea, Repsol no necesitaría pedir permiso a nadie".