L D (Europa Press) En una carta remitida a la dirección general de Asuntos Religiosos del Ministerio de Justicia, el secretario general de la Comisión Islámica de España, Riay Tatary, denuncia que los imanes "han sufrido una campaña de desprestigio alimentada por alguna declaración, con desinformación y por parte de algún representante del nuevo Ejecutivo". "La ignorancia de muchos sobre el origen real de la amenaza terrorista, les ha llevado a ver fantasmas en cada mezquita, en cada imán y en cada musulmán", destaca.
Así, por ejemplo, critica las "complejidades burocráticas" que se imponen a la apertura de nuevas mezquitas y cementerios por parte de las administraciones locales "bajo apremios y amenazas fácticas fuera de la ley, aunque excusándose en ella". Desde su punto de vista, esta situación se debe al "aumento de ideas islamófobas en la opinión pública, alimentada desde algunos grupos y medios". Igualmente, censura el "entorpecimiento" que sufren los imanes extranjeros para la obtención de visados de entrada en España.
Falta de disposición para regular la poligamia
La carta también critica la falta de disposición a regularizar "las situaciones de coesposas" (poligamia) y sus hijos, las dificultades que tienen los ciudadanos musulmanes para disfrutar de las festividades sustituibles por motivos religiosos ("depende de la comprensión individual del empleador") y el "receso" por parte de la Administración en el estudio, catalogación y conservación del patrimonio histórico nacional hispanomusulmán.
Otro aspecto que preocupa a la comunidad islámica es la falta de disposición por parte del Gobierno a desarrollar la enseñanza de la religión islámica en los colegios públicos, "pese al talante de diálogo". Tatary recuerda que se presupuestaron un total de 40 profesores de religión islámica, si bien aún no han comenzado las clases. "Reunión tras reunión, se habla pero no se hace nada concreto. Al parecer existen, en los ámbitos educativos, partidarios de un cierto laicismo a ultranza inconstitucional que entorpece o detiene cualquier atisbo de avance en el cumplimiento de la legalidad vigente", añade la carta.
Por otra parte, advierte de que las comunidades islámicas continúan "en régimen de autofinanciación de supervivencia" con los "escasos medios" de que disponen por las aportaciones de los fieles, "a pesar de las promesas de ayuda económica de la Administración".
En definitiva, la Comisión Islámica encuentra "buena disposición al encuentro y al diálogo" por parte del Gobierno y la "buena acogida" de las iniciativas que ha planteado, especialmente por parte por la directora general de Asuntos Religiosos, Mercedes Rico. No obstante, lamenta que "las buenas intenciones" no se traduzcan "en hechos palpables".