L D (EFE) Para Scott McClellan, el portavoz de la Casa Blanca, es "desconcertante que Newsweek reconozca ahora que los hechos eran incorrectos y que se nieguen a ofrecer una retractación".
McClellan dijo este lunes en declaraciones a la prensa que "existen ciertos estándares periodísticos que es necesario cumplir y que no se cumplieron en este caso". Sin embargo, el portavoz excluyó que el Gobierno estadounidense vaya a exigir a Newsweek que se retracte.
En la edición de esta semana, el director de la revista, Mark Whitaker, dijo que lamentaba que "cualquier parte" de su reportaje "esté equivocado" y extiende su pésame "a las víctimas de la violencia". La revista estadounidense se fió a la hora de publicar la información de una fuente "antigua y confiable", y que no ha identificado.
Esa fuente dice ahora recordar "claramente" informes que mencionaban el uso inadecuado del libro sagrado, entre ellos un incidente en el que agentes de EEUU habían colocado el Corán en la taza del inodoro. No obstante, ya no estaba seguro o segura de que fuese en el informe sobre el que le preguntó el periodista de Newsweek Michael Isikoff. La revista indica en su edición de este lunes que ese funcionario "no quiso engañar, sino que carecía del conocimiento detallado" del informe al que hacía referencia Isikoff.
McClellan dijo este lunes en declaraciones a la prensa que "existen ciertos estándares periodísticos que es necesario cumplir y que no se cumplieron en este caso". Sin embargo, el portavoz excluyó que el Gobierno estadounidense vaya a exigir a Newsweek que se retracte.
En la edición de esta semana, el director de la revista, Mark Whitaker, dijo que lamentaba que "cualquier parte" de su reportaje "esté equivocado" y extiende su pésame "a las víctimas de la violencia". La revista estadounidense se fió a la hora de publicar la información de una fuente "antigua y confiable", y que no ha identificado.
Esa fuente dice ahora recordar "claramente" informes que mencionaban el uso inadecuado del libro sagrado, entre ellos un incidente en el que agentes de EEUU habían colocado el Corán en la taza del inodoro. No obstante, ya no estaba seguro o segura de que fuese en el informe sobre el que le preguntó el periodista de Newsweek Michael Isikoff. La revista indica en su edición de este lunes que ese funcionario "no quiso engañar, sino que carecía del conocimiento detallado" del informe al que hacía referencia Isikoff.