L D (Agencias) En relación con este homicidio, ocurrido en la madrugada del pasado sábado durante una pelea en un concierto organizado en el marco de las fiestas de la Patum de Berga, y en el que murió apuñalado Josep Maria Isanta, de 22 años, cuatro de los menores de edad arrestados por los Mossos han ingresado en centros de internamiento de régimen cerrado a propuesta del fiscal.
Fuentes judiciales han informado de que la juez de Berga ha decidido esta tarde interrogar a los 11 detenidos mayores de edad en la comisaría al no ser posible garantizar la seguridad de los arrestados a la entrada del juzgado, donde por la tarde se han ido concentrando más de un millar de vecinos que han increpado a los agentes autonómicos con frases como "mossos, ¿dónde estabais?" o "la policía tortura y asesina". Centenares de vecinos llevaban ante las puertas del juzgado desde por la mañana, cuando han entregado a la juez instructora casi 9.000 firmas para exigirle que no deje en libertad a los detenidos por su presunta implicación en el homicidio de Josep Maria Isanta, un joven muy conocido en la población y que formaba parte de una de las comparsas de las fiestas.
Los Mossos d'Esquadra arrestaron tras los incidentes del concierto a 18 jóvenes, nueve de ellos con antecedentes penales, por su presunta vinculación con el homicidio, aunque posteriormente tres menores de edad fueron puestos en libertad sin cargos, y también identificaron a una menor de 14 años que, por su edad, no puede ser imputada penalmente.
Fuentes judiciales han informado de que la juez de Berga ha decidido esta tarde interrogar a los 11 detenidos mayores de edad en la comisaría al no ser posible garantizar la seguridad de los arrestados a la entrada del juzgado, donde por la tarde se han ido concentrando más de un millar de vecinos que han increpado a los agentes autonómicos con frases como "mossos, ¿dónde estabais?" o "la policía tortura y asesina". Centenares de vecinos llevaban ante las puertas del juzgado desde por la mañana, cuando han entregado a la juez instructora casi 9.000 firmas para exigirle que no deje en libertad a los detenidos por su presunta implicación en el homicidio de Josep Maria Isanta, un joven muy conocido en la población y que formaba parte de una de las comparsas de las fiestas.
Los Mossos d'Esquadra arrestaron tras los incidentes del concierto a 18 jóvenes, nueve de ellos con antecedentes penales, por su presunta vinculación con el homicidio, aunque posteriormente tres menores de edad fueron puestos en libertad sin cargos, y también identificaron a una menor de 14 años que, por su edad, no puede ser imputada penalmente.
Internados los cuatro menores
El juzgado de menores número 1 de Barcelona ha decretado el ingreso en régimen cerrado de los cuatro menores detenidos, que han sido internados en los centros educativos Els Til·lers y L'Alzina -dos en cada uno-, acusados de los delitos de homicidio, lesiones y participación en riña tumultuosa.
La polémica por el papel de los Mossos durante los incidentes en el concierto que desembocaron en la agresión mortal ha saltado a la arena política, ya que los grupos de CIU y PPC han exigido a la consejera de Interior, Montserrat Tura, que comparezca en el Parlament para detallar cuál fue la actuación de la Policía Autonómica la noche del crimen, a lo que ella ha accedido. Tura ha rechazado las acusaciones de "cobardía y desidia" lanzadas contra los Mossos d'Esquadra de Berga y ha recordado que los agentes de la Policía Autonómica "han acabado recibiendo insultos en todas la fiestas de la Patum" por parte de algunos colectivos de jóvenes.
Además, ha negado que los Mossos tardaran media hora en acudir al lugar del crimen tras ser advertidos de que un grupo de jóvenes estaba buscando bronca, y ha dicho que las llamadas recibidas en la comisaría "están grabadas" y puestas a disposición judicial, de manera que "se puede comprobar" que los agentes actuaron con rapidez.
El juzgado de menores número 1 de Barcelona ha decretado el ingreso en régimen cerrado de los cuatro menores detenidos, que han sido internados en los centros educativos Els Til·lers y L'Alzina -dos en cada uno-, acusados de los delitos de homicidio, lesiones y participación en riña tumultuosa.
La polémica por el papel de los Mossos durante los incidentes en el concierto que desembocaron en la agresión mortal ha saltado a la arena política, ya que los grupos de CIU y PPC han exigido a la consejera de Interior, Montserrat Tura, que comparezca en el Parlament para detallar cuál fue la actuación de la Policía Autonómica la noche del crimen, a lo que ella ha accedido. Tura ha rechazado las acusaciones de "cobardía y desidia" lanzadas contra los Mossos d'Esquadra de Berga y ha recordado que los agentes de la Policía Autonómica "han acabado recibiendo insultos en todas la fiestas de la Patum" por parte de algunos colectivos de jóvenes.
Además, ha negado que los Mossos tardaran media hora en acudir al lugar del crimen tras ser advertidos de que un grupo de jóvenes estaba buscando bronca, y ha dicho que las llamadas recibidas en la comisaría "están grabadas" y puestas a disposición judicial, de manera que "se puede comprobar" que los agentes actuaron con rapidez.
Más de 2.000 personas en el funeral
Más de 2.000 personas, según fuentes municipales, han abarrotado la iglesia Santa Eulalia y la plaza Sant Pere de Berga para rendir un último homenaje a Josep Maria Isanta, en un emotivo funeral en el que el féretro ha sido recibido con un largo aplauso. La emoción era incontenible en el interior del templo, donde la mayoría de los asistentes estaban deshechos en un mar de lágrimas, y también reinaba en la plaza de Sant Pere, presidida por varias sábanas blancas con crespones negros, algunas pancartas que pedían "justicia" y un gran cartel con la frase "Isanta, no te olvidamos".
Por su parte, el alcalde de Berga, Ramon Camps, ha negado que el homicidio de Josep Maria Isanta "fuera el desenlace" de enfrentamientos anteriores entre grupos de jóvenes y ha desvinculado la pelea del conflicto que algunos sectores de la población mantienen con los Mossos d'Esquadra.
Más de 2.000 personas, según fuentes municipales, han abarrotado la iglesia Santa Eulalia y la plaza Sant Pere de Berga para rendir un último homenaje a Josep Maria Isanta, en un emotivo funeral en el que el féretro ha sido recibido con un largo aplauso. La emoción era incontenible en el interior del templo, donde la mayoría de los asistentes estaban deshechos en un mar de lágrimas, y también reinaba en la plaza de Sant Pere, presidida por varias sábanas blancas con crespones negros, algunas pancartas que pedían "justicia" y un gran cartel con la frase "Isanta, no te olvidamos".
Por su parte, el alcalde de Berga, Ramon Camps, ha negado que el homicidio de Josep Maria Isanta "fuera el desenlace" de enfrentamientos anteriores entre grupos de jóvenes y ha desvinculado la pelea del conflicto que algunos sectores de la población mantienen con los Mossos d'Esquadra.