(Libertad Digital) El presidente de la Asociación Víctimas del Terrorismo, Francisco José Alcaraz, señaló que el Gobierno, de quien todavía no ha recibido "ninguna reacción", debe hacerse eco de lo reivindicado en la manifestación convocada en Madrid y no negociar "con la sangre de nuestras familias".
Alcaraz insistió en que su asociación no quiere una negociación con las personas que han asesinado a sus familiares y recordó que "no hay paz sin justicia". Añadió que, quien haya vivido en España en los últimos cuarenta años, sabe que en el momento en que se realice una concesión a la banda terrorista "ETA volverá a matar", algo en lo que coincide Laura Jiménez, víctima en los atentados del 11-M, quien señaló que "si cedemos ahora, todos los muertos no han servido para nada".
Alcaraz insistió en que su asociación no quiere una negociación con las personas que han asesinado a sus familiares y recordó que "no hay paz sin justicia". Añadió que, quien haya vivido en España en los últimos cuarenta años, sabe que en el momento en que se realice una concesión a la banda terrorista "ETA volverá a matar", algo en lo que coincide Laura Jiménez, víctima en los atentados del 11-M, quien señaló que "si cedemos ahora, todos los muertos no han servido para nada".
El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró que la manifestación es un "gran éxito", ya que a ella han acudido cientos de miles de personas que quieren expresar al Gobierno de España su total desacuerdo con respecto a la negociación con ETA. Rajoy afirmó que el terrorismo tiene que ser derrotado con todos los instrumentos del Estado de Derecho, y reiteró su oposición a cualquier negociación con ninguna banda terrorista. El líder del PP recalcó que la solución está en la política de consenso, la cual ha sido útil.El presidente de la Generalidad Valenciana, Francisco Camps, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, reclamaron al Ejecutivo "que esté junto a las víctimas", al igual que los cientos de miles de personas que se manifiestan en Madrid contra la negociación con ETA.
Camps afirmó que "toda la democracia tiene que estar al lado de las víctimas" y que "la sociedad española tiene que seguir edificando la democracia". "Hoy más que nunca debemos estar junto a las víctimas. Los terroristas están donde tienen que estar", aseguró. Por su parte, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, pidió al Gobierno "que escuche al pueblo" y reiteró su oposición a negociar con ETA. También la presidenta del PP vasco, María San Gil, mostró su confianza en que la manifestación haga "reflexionar" el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para que "rectifique" su política antiterrorista porque, subrayó, "a ETA no se la convence, sino que se la vence".
Poco antes de su inicio, San Gil insistió en que "no debe haber negociación" y en que la política antiterrorista seguida hasta ahora "es la mejor manera" de luchar contra la banda terrorista. San Gil mostró su deseo de que Zapatero atienda el mensaje de los ciudadanos y de que "por el bien de todos, rectifique", aunque subrayó que el presidente del Ejecutivo "ya se ha unido al club de Perpiñan y de Estella".
Carlos Iturgaiz, ex presidente del PP vasco, destacó que había acudido a la convocatoria de la AVT por los concejales Miguel Ángel Blanco y Manuel Zamarreño, asesinado este sábado hace cinco años en Durango, así como por el dirigente del PSE-EE Fernando Buesa.
Iturgaiz subrayó que España "no puede ni perdonar ni olvidar" y que a ETA "hay que combatirla con firmeza democrática" y aseguró que lamentaría que ningún dirigente del PSOE se sumase a esta marcha que, destacó "no ha sido convocada por el PP, sino por las víctimas". Además, criticó que la capilla ardiente del histórico dirigente de Herri Batasuna Jon Idígoras se haya instalado en el Ayuntamiento de Amorebieta, gobernando por el PNV.