(Libertad Digital) El Gobierno aprovechará la implantación de los juicios rápidos civiles y la creación de las Oficinas de Señalamiento Inmediato para agilizar los juicios de desahucio de inquilinos morosos. En respuesta a una pregunta escrita planteada por la diputada del Grupo Parlamentario Popular, Alicia Castro Masaveu, sobre qué medidas el Gobierno prevé implantar para agilizar los juicios de desahucio para el impago de alquileres, el Ejecutivo señala que para obtener este objetivo se prevé la creación de Oficinas de Señalamiento Inmediato, el establecimiento de Turnos de Asistencia Continuada entre los Juzgados de Primera Instancia, y de un turno especial de Asistencia Jurídica Gratuita de Abogados y Procuradores.
El Gobierno destaca que la Ley de Enjuiciamiento Civil, en la que están contenidos los juicios rápidos civiles, establece que el Ministerio de Justicia, de acuerdo con las Comunidades Autónomas con competencias asumidas en materia de justicia y previo informe favorable del Consejo General del Poder Judicial, podrá crear Oficinas de Señalamiento Inmediato en todos los partidos judiciales que cuentan con separación de órdenes jurisdiccionales.
De esta manera, la nueva regulación consiste en agilizar la celebración de las vistas y comparecencias de determinados procedimientos civiles, cuya tramitación procesal está ordinariamente exenta de complicación, entre ellos los juicios de desahucio de finca urbana por falta de pago, reclamaciones de cantidades no superiores a 3.000 euros y reclamaciones de rentas acumuladas a la acción de desahucio.
En enero, el Ministerio de Justicia creó equipos de trabajo para seguir el plan de actuación del Gobierno, que prevé la implantación progresiva y no generalizada de los juicios rápidos civiles, para lo que se ha seleccionado cinco ciudades -Madrid, Valencia, Jaén, Vigo y San Cristóbal de La Laguna- donde se lleva a cabo la experiencia piloto. La implantación de los juicios rápidos en materia civil será decisiva para conseguir dos de los grandes objetivos que se ha propuesto este Gobierno, dinamizar el mercado del alquiler y agilizar la Justicia.
Según informaba este martes el diario Expansión, el Gobierno quiere poner en marcha la agilización de los desahucios de inquilinos morosos para agilizar el mercado del alquiler. Se trata de rebajar el proceso de los doce meses de media actuales a dos o tres. La reforma incluiría la puesta en marcha de unas Oficinas de Señalamiento Inmediato dentro de los juzgados de Primera Instancia, que serían las encargadas acelerar los procedimientos administrativos. Este nuevo instrumento público fue concebido en la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Civil de 2003 para llevar a cabo todo el desahucio y que hasta ahora no se había puesto en práctica.
Madrileños y barceloneses podrían ser los primeros en probarlo
Si todo marcha según los planes del Gobierno, la reforma, que quedó pendiente en la pasada legislatura, se pondría en marcha en breve. De esta manera, los juzgados de primera instancia de Madrid y de Barcelona podrían disponer de las primeras Oficinas de Señalamiento Inmediato en poco tiempo. Según explica la información de Expansión, la gran ventaja de estas oficinas es que, una vez recibida la demanda del arrendador, se encargarán de hacer un seguimiento total del procedimiento –registro, reparto de demandas, señalamiento de vistas, comparecencias, o reclamación de las cantidades debidas–.
El funcionamiento, a tenor de la información, no bajaría, al menos, de tres meses, en el caso de que los Juzgados procedieran con rapidez. Según Expansión el proceso sería el siguiente: el arrendador presenta la demanda en la Oficina de Señalamiento. Este nuevo departamento se encarga de citar al demandado y envía la demanda al juzgado para que dé lo más rápidamente posible –no más de 20 días– fecha y hora de la vista. Cuando se notifica la sentencia hay que esperar unos 50 días para que el inquilino abandone el piso –en teoría puede pedir otro mes de prórroga–.