Microsoft paga 250.000 dólares de recompensa a las personas que identificaron al creador del gusano Sasser

L D (Agencias) El gusano Sasser, diseñado para atacar el sistema operativo Windows, infectó a ordenadores de todo el mundo, bloqueándolos y reiniciándolos. Cuando se lanzó el gusano en mayo de 2004, Microsoft trabajó rápidamente para ayudar a proteger a los clientes. A las 48 horas de la aparición del gusano, Microsoft proporcionó gratuitamente una herramienta de limpieza que, de forma automática, eliminaba Sasser de los ordenadores infectados.

 

El gusano Sasser se convirtió en una clave maligna destructiva y de alcance mundial. A partir de este momento, Microsoft colaboró con agentes judiciales para compartir información, hasta conseguir el arresto por este caso. El creador del gusano fue arrestado por las autoridades policiales alemanas a los siete días desde el lanzamiento de Sasser

 

Para la vicepresidenta y consejera general adjunta de Microsoft, Andy Andersson. "Ha sido importante y gratificante colaborar y apoyar a las autoridades judiciales en este caso, y estamos contentos de dar una recompensa económica a aquellos individuos que nos facilitaron informaciones fiables que ayudaron a la policía alemana a resolver este caso".

 

La recompensa se pagará a través del programa de recompensa anti-virus de Microsoft, una iniciativa establecida en noviembre de 2003 por la compañía junto con el FBI y los servicios secretos de EE.UU., para que la gente ayude a identificar a los responsables de lanzar virus y gusanos malignos en Internet y disuadir a los criminales cibernautas.

 

 

El joven alemán de 19 años que desarrolló y difundió los virus informáticos "Sasser" y "Netsky" fue condenado este  viernes a una pena un año y nueve meses en régimen de libertad condicional y a 30 horas de servicios a la comunidad por la Audiencia Provincial de Verden (norte de Alemania).

La Audiencia Provincial declaró al joven culpable de sabotaje informático y de manipulación de datos. La fiscalía había pedido dos años de reclusión en una penitenciaria de menores o, en su lugar, de tres años en régimen de libertad condicional, así como 200 horas de trabajos para el bienestar común. Durante el juicio, que se centró en casos de denuncias de empresas en Alemania, el acusado confesó su culpabilidad.

El joven también desarrolló el virus "Netsky", que afectó igualmente a muchos ordenadores a través del correo electrónico.