L D (Europa Press) Hablaba Cebrián de la recuperación de la memoria histórica en España y del derecho de todos a "desenterrar a su abuelo". Pero la actualidad le llevó a hilar su discurso con las negociaciones del Gobierno con ETA.
Lo consiguió argumentando que hay un problema entre la memoria, la reconciliación y la reparación, "un problema con el que –según él– tendremos que vivir siempre". "Lo vamos a vivir pronto si efectivamente hay un proceso de paz con ETA, en donde la derecha esta mistificando todo el diálogo". Así, Cebrián subrayó que "el proceso de paz con ETA no significa un acuerdo político con la banda terrorista", destacando que "ni ETA está pensando eso con toda seguridad, ni lo está pensando el Gobierno, ni lo está pensando nadie".
Según Cebrián, "un proceso de paz con ETA significa un acuerdo sobre los presos, a lo que señaló que "eso lo sabe el Gobierno, la derecha, el Gobierno vasco y lo sabe ETA". Apuntó que esto "contradice el espíritu de reparación y de justicia", pero "la cuestión está en saber si el interés social y la convivencia de los españoles merece renunciar en determinados momentos a algo de la reparación, y de la justicia en pro a la no repetición de esa situación". Así, apuntó –volvía así al título de su conferencia– que los españoles de la transición renunciaron a una demanda de responsabilidades sobre el pasado, en orden a que no se repitiera éste.
Cebrián, que intervino en el curso de verano "España en la memoria de tres generaciones: de la esperanza a la reparación" que organiza la Universidad Complutense en El Escorial, hizo un recorrido histórico desde la dictadura, pasando por la transición, hasta la llegada de la democracia, a través –dicen las agencias de información– de sus vivencias personales. Así, destacó que su generación vivió como nadie el tránsito de una España a otra, y denunció que durante la transición hubo un espíritu de no mirar al pasado, ya sea por el miedo que existía o por que la democracia la estaban haciendo los franquistas.
El derecho a desenterrar a un abuelo
Para Cebrián la recuperación de la memoria es "un derecho de todas las personas", por lo que le sorprende que a "alguien se le niegue el derecho a desenterrar a su abuelo". En este sentido, manifestó que le parece "lógico que las nuevas generaciones pidan una recuperación de la memoria".
A lo largo de su intervención, el consejero del Grupo PRISA, recordó varios acontecimientos que marcaron la historia de nuestro país, como la aparición de ETA, o el asesinato en el año 1973 del almirante Carrero Blanco, del que subrayó que muchos sectores de la oposición "repudiaron" el asesinato, pero con la boca pequeña. Así, tuvo también palabras para el ex presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, de quién afirmó que "fue literalmente un converso honesto, que construyó la democracia de verdad".
La memoria truncada de los nacionalismos
Cebrián, advirtió que la Escuela Historiográfica Española "tiene algunas deudas pendientes con este país", entre las que destacó la historia de los nacionalismos, "se esta trucando otra vez otro tipo de memoria", que es la historia de los nacionalismos catalán y vasco. De esta manera, resaltó que es "urgente" que esta escuela llegue a consensos fundamentales sobre esta cuestión, además de la cuestión del pasado cultural europeo, y la integración cristina o mahometana "en un momento en que la inmigración y el terrorismo de origen extremista islamista empieza a ser una preocupación".
El Archivo de Salamanca y el del franquismo
Por otra parte, criticó la política del Partido Popular. Así, destacó que durante los ochos años de Gobierno del PP, se reprodujo la división entre los españoles, haciéndose una diferenciación entre españoles buenos y malos, a la vez que desapareció el sentimiento de consenso que existía en años anteriores.
También reprochó el posicionamiento del PP contrario a la devolución de los papeles del Archivo de Salamanca al Gobierno catalán. En este sentido, también se refirió al Archivo del Franquismo, del que afirmó que está en manos de la Fundación Francisco Franco, y advirtió que "el PP durante años ha dado 26.000 euros anuales a la hija de Franco para que gestionase el Archivo, que le es negado a los historiadores e investigadores, salvo sin son afines". "Creo que esto es literalmente indignante", subrayó.
Por ello denunció que ese Archivo está en manos privadas, se financia con fondos públicos, y se administra con "criterios ideológicos y absolutamente panegíricos de exaltación del dictador". "Creo que es algo que el Gobierno debería poner coto cuanto antes", afirmó.
Canal+ en abierto y sin preocupaciones
Cebrián apoya la negociación con ETA porque dice que se centrará en ceder ante los presos