L D (EFE) "Es posible. Pero pensamos que ese pequeño pedazo de espuma aislante no causó un daño considerable", apuntó el subdirector de programas de la agencia espacial, Wayne Hale . En esos momentos, la nave había llegado a una altura de unos 70.000 metros de altura. Hale indicó que aunque hubiese golpeado la nave, los cálculos han indicado que lo habría hecho con una fuerza diez veces inferior a la necesaria para causar algún daño.
Hace dos años y medio un trozo similar se desprendió del depósito externo de combustible del transbordador "Columbia" perforando un sector del ala izquierda de la nave. Los gases candentes del reingreso en la atmósfera desintegraron la nave y se cobraron la vida de sus siete tripulantes.
Steve Poulos, director del proyecto del transbordador, señaló que se temía que algún trozo desprendido hubiese tocado un sector del punto que alberga al tren de aterrizaje de la nave. "Pero no hemos visto nada que nos preocupe o que nos impida ordenar el reingreso en la atmósfera" el 7 de agosto, cuando concluye la misión del "Discovery". El problema llevó a las autoridades de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) a cancelar de manera indefinida todas las misiones de los transbordadores estadounidenses.