L D (EFE) En una entrevista con la agencia EFE y preguntada sobre cómo se podría solucionar la situación de violencia que vive Irak, la secretaria de Política Internacional del PSOE,Trinidad Jiménez, sugirió que la única vía en estos momentos sería "una mayor implicación de la ONU". "Ahora es muy difícil dar marcha atrás, porque si se van las tropas estadounidenses y la coalición internacional, la situación de inseguridad seguramente será mayor y dejar a la población abandonada a su suerte sería peor", dijo la dirigente socialista.
Por eso, Jiménez reclamó "un gran acuerdo de la comunidad internacional, siempre bajo el paraguas de la ONU, para ver qué pasos se tienen que dar", y comentó que "sería bueno que EEUU reconociera el error que supuso esta guerra y empezara a tomar otras decisiones encaminadas únicamente a garantizar la estabilidad y la gobernabilidad en un país que merece ser libre y recuperar su plena soberanía".
Por eso, Jiménez reclamó "un gran acuerdo de la comunidad internacional, siempre bajo el paraguas de la ONU, para ver qué pasos se tienen que dar", y comentó que "sería bueno que EEUU reconociera el error que supuso esta guerra y empezara a tomar otras decisiones encaminadas únicamente a garantizar la estabilidad y la gobernabilidad en un país que merece ser libre y recuperar su plena soberanía".
Sobre la postura del Ejecutivo ante el conflicto del Sahara Occidental, Jiménez subrayó que no se ha modificado y que consiste en la defensa del derecho de libre autodeterminación del pueblo saharaui "bajo los auspicios de la ONU". Jiménez destacó que el Gobierno de Zapatero, "al contrario del de José María Aznar, que no hizo nada, está tratando de jugar un papel activo" para facilitar el acuerdo.
No obstante, subrayó que España, al no ser parte implicada, "no puede imponer la solución" al conflicto, y debe ser la ONU quien decida cómo conducir el proceso en función de los acuerdos a los que lleguen Marruecos y el Sahara. Trinidad Jiménez recordó la muerte de diecisiete militares españoles en Afganistán el pasado martes, a cuyos familiares trasladó su "pésame y solidaridad", y aseguró que "el dolor y la tristeza que sentimos no puede ser motivo de un replanteamiento del papel de nuestras Fuerzas Armadas" en el exterior.
La dirigente socialista destacó que el Gobierno no tiene "ninguna intención de ordenar la retirada de las tropas", que "cumplen una labor de extraordinaria importancia, contribuyendo con su presencia a dar estabilidad democrática a un país que atraviesa una situación muy difícil", lo que se corresponde con "el compromiso firme y solidario" manifestado por el Gobierno "con la paz y la libertad".
No obstante, subrayó que España, al no ser parte implicada, "no puede imponer la solución" al conflicto, y debe ser la ONU quien decida cómo conducir el proceso en función de los acuerdos a los que lleguen Marruecos y el Sahara. Trinidad Jiménez recordó la muerte de diecisiete militares españoles en Afganistán el pasado martes, a cuyos familiares trasladó su "pésame y solidaridad", y aseguró que "el dolor y la tristeza que sentimos no puede ser motivo de un replanteamiento del papel de nuestras Fuerzas Armadas" en el exterior.
La dirigente socialista destacó que el Gobierno no tiene "ninguna intención de ordenar la retirada de las tropas", que "cumplen una labor de extraordinaria importancia, contribuyendo con su presencia a dar estabilidad democrática a un país que atraviesa una situación muy difícil", lo que se corresponde con "el compromiso firme y solidario" manifestado por el Gobierno "con la paz y la libertad".
Jiménez defiende la Alianza de Civilizaciones de Zapatero
La dirigente socialista también aseguró que tras la acogida de la propuesta de Zapatero de una "Alianza de Civilizaciones" para salvar el choque entre culturas y religiones, es hora de impulsar medidas "que vayan a la raíz del terrorismo internacional" para vencerlo. Jiménez destacó que la cooperación entre todos los países es "la única solución" para combatir eficazmente el terrorismo, y se mostró convencida de que la idea del presidente del Gobierno español de crear una Alianza de Civilizaciones -que busca un encuentro entre occidente y el mundo islámico- ayudaría a atajar las causas del terrorismo y a luchar contra sus raíces.
"Hasta el momento, la propuesta de Zapatero estaba encaminada a que cuajara la idea de que hay que lograr un gran acuerdo internacional", explicó, tras subrayar que su iniciativa, en todo caso, deja muy claro que el terrorismo no está causado por una religión, por una cultura o por una raza. Para combatirlo, prosiguió, hay que buscar sus orígenes, y para ello es fundamental "buscar una mayor cooperación entre el mundo occidental y el oriental para atajar esas causas".
La educación y los procesos de democratización abiertos en muchos países islámicos son dos aspectos fundamentales para avanzar hacia una mejor convivencia -dijo-, y por ello consideró que la comunidad internacional debe implicarse para garantizar que estos dos elementos se desarrollan con garantías. Trinidad Jiménez confió en que la Cumbre Euromediterránea que se celebrará en Barcelona en noviembre constituirá un paso importante en el objetivo de la paz en toda la cuenca del Mediterráneo.
El Gobierno, explicó, quiere aprovechar esta cita para trabajar sobre un orden del día "que permita avanzar en el diálogo y la cooperación", y subrayó que independientemente de los resultados de la Cumbre "ya es muy importante que se puedan sentar juntos Israel y Palestina, Siria y Jordania, y que se puedan poner de acuerdo en una agenda".
Se mostró convencida de que esta Cumbre supondrá un paso adelante en la normalidad democrática y la cooperación, y permitirá "que se sienten las bases para la paz entre países que tienen posiciones de enfrentamiento". La "única" vía para acabar con el terrorismo internacional es, a su juicio, "la coordinación estrecha y precisa entre todos los Estados", ya que "es un fenómeno que no está situado en un solo país, es un enemigo invisible muy difícil de combatir" y requiere la cooperación entre los servicios de inteligencia y la policía.
"Hasta el momento, la propuesta de Zapatero estaba encaminada a que cuajara la idea de que hay que lograr un gran acuerdo internacional", explicó, tras subrayar que su iniciativa, en todo caso, deja muy claro que el terrorismo no está causado por una religión, por una cultura o por una raza. Para combatirlo, prosiguió, hay que buscar sus orígenes, y para ello es fundamental "buscar una mayor cooperación entre el mundo occidental y el oriental para atajar esas causas".
La educación y los procesos de democratización abiertos en muchos países islámicos son dos aspectos fundamentales para avanzar hacia una mejor convivencia -dijo-, y por ello consideró que la comunidad internacional debe implicarse para garantizar que estos dos elementos se desarrollan con garantías. Trinidad Jiménez confió en que la Cumbre Euromediterránea que se celebrará en Barcelona en noviembre constituirá un paso importante en el objetivo de la paz en toda la cuenca del Mediterráneo.
El Gobierno, explicó, quiere aprovechar esta cita para trabajar sobre un orden del día "que permita avanzar en el diálogo y la cooperación", y subrayó que independientemente de los resultados de la Cumbre "ya es muy importante que se puedan sentar juntos Israel y Palestina, Siria y Jordania, y que se puedan poner de acuerdo en una agenda".
Se mostró convencida de que esta Cumbre supondrá un paso adelante en la normalidad democrática y la cooperación, y permitirá "que se sienten las bases para la paz entre países que tienen posiciones de enfrentamiento". La "única" vía para acabar con el terrorismo internacional es, a su juicio, "la coordinación estrecha y precisa entre todos los Estados", ya que "es un fenómeno que no está situado en un solo país, es un enemigo invisible muy difícil de combatir" y requiere la cooperación entre los servicios de inteligencia y la policía.