(Libertad Digital) Según recoge el diario ABC, junto a "El Chino", "El Conejo"y Rafa Zouhier, se encontraban en el piso al menos otros dos individuos apodados "Codino" y "Gitano", aunque su nombre no consta en el informe del juez. Las investigaciones apuntan a que el objetivo de la reunión en el piso de Raifak era intercambiar armas por sustancias estupefacientes, y estaba relacionada con las intervenciones telefónicas llevadas a cabo por la Policía y que han sido incorporadas al sumario del 11-M.
Un mes antes de los atentados, la Udyco (Unidad de Drogas y Crimen Organizado de la Policía), ya había interceptado una conversación entre los marroquíes Lofti Sbai y Rafa Zouhier en la que mencionan a Raifak, e incluso se detectó una llamada de éste a Zouhier el 19 de marzo de 2004. Debido a los numerosos contactos entre ambos, la Policía dedujo la relación entre Soufiane Raifak con los autores de los atentados de Madrid, y apuntó la posibilidad de su intervención directa en la colocación de alguna mochila-bomba.
El testigo dijo que Raifak era una persona extremadamente violenta, y que hizo varios viajes con Zouhier al norte a "intercambiar drogas por armas y explosivos".
Como Raifak sospechaba que podía ser detenido por su relación con Zouhier y con "el Chino", utilizó identidades falsas hasta su captura el pasado 12 de abril, un mes después de que fuera detenido en Valdepeñas por malos tratos en el ámbito familiar y por no tener papeles de residencia, lo que provocó que fuera internado en Algeciras en espera de su expulsión.