LD (Europa Press) Los inspectores de hacienda se oponen a los planes del Gobierno de aumentar los impuestos indirectos sobre la luz, el tabaco y el alcohol. Según han expresado, "el incremento de la presión fiscal volverá a recaer sobre los ciudadanos que cumplen rigurosamente con sus obligaciones tributarias". El camino que debería seguir el Ejecutivo, según la organización de inspectores, debería ser una lucha "eficaz y seria" contra el fraude fiscal, por lo que pidió al Ejecutivo la aprobación de un "verdadero" Plan de Lucha contra el Fraude y del Estatuto Orgánico de la Agencia Tributaria, con una participación efectiva de las Comunidades Autónomas, tanto en los órganos de dirección como en sus planes de actuación.
Los Inspectores de Hacienda explicaron en un comunicado que la propuesta planteada por el Gobierno de incrementar la presión fiscal tendría razón de ser si el fraude fiscal existente actualmente en España estuviera en niveles similares al del resto de países europeos, y si el Gobierno hubiera realizado todos los esfuerzos necesarios para luchar de manera efectiva contra el fraude fiscal. Los inspectores consideran que la medida "es un parche", y el portavoz de la organización considera que "Esperanza Aguirre propuso una solución definitiva".
Según destacaron, todos los estudios existentes sitúan el nivel de fraude en España en tasas superiores al 20 por ciento del PIB y recordaron que en un informe que el actual ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, trasladó en 2002 a la Ejecutiva del PSOE y que tomaba como base datos de la Unión Europea, se señalaba que el fraude fiscal se elevaba a 25.000 millones de euros anuales, si se incluye el de las cuotas de la Seguridad Social.