L D (EFE) El Nobel de la Paz supone para El Baradei una reafirmación de que "la energía nuclear debe estar a disposición del mundo para fines pacíficos", y "reconoce los desafíos que afronta la organización" para lograr esos objetivos.
El diplomático egipcio subrayó la confianza depositada en su persona, en la diplomacia y en la cooperación internacional para solucionar las controversias pendientes. Este premio "reconoce el trabajo de la agencia y el papel del multilateralismo para afrontar los desafíos" pendientes, reafirmando los esfuerzos para seguir trabajando con el fin de que "el mundo siga siendo seguro" y que "la energía nuclear no sea mal utilizada para fines militares" .
El premio servirá de acicate "para continuar haciendo lo que hacemos, siendo imparciales, actuando con integridad", subrayó El Baradei, que destacó en reiteradas ocasiones el trabajo de la organización que dirige. El Premio Nobel de la Paz también respalda la forma de trabajar de la AIEA, ya que pone de manifiesto que cuenta con un "enorme apoyo público", destacó El Baradei, que agradeció el trabajo de todos sus compañeros del organismo de Naciones Unidas que dirige. "Espero que continuemos el duro camino que tenemos ante nosotros" en cuanto al desarme nuclear y la lucha contra la proliferación de armas atómicas, añadió.
Para El Baradei, que recientemente ha sido reelegido por unanimidad por los miembros de la Junta de Gobernadores de la AIEA para un tercer mandato de cuatro años, la concesión del galardón fue una auténtica sorpresa, ya que no había recibido con anterioridad llamada alguna del Comité Nobel. En tono distendido, el director general de la AIEA aseguró que se enteró de la concesión del premio por televisión y que lo primero que hizo fue besar emocionado a su mujer que le acompañaba.
El diplomático egipcio subrayó la confianza depositada en su persona, en la diplomacia y en la cooperación internacional para solucionar las controversias pendientes. Este premio "reconoce el trabajo de la agencia y el papel del multilateralismo para afrontar los desafíos" pendientes, reafirmando los esfuerzos para seguir trabajando con el fin de que "el mundo siga siendo seguro" y que "la energía nuclear no sea mal utilizada para fines militares" .
El premio servirá de acicate "para continuar haciendo lo que hacemos, siendo imparciales, actuando con integridad", subrayó El Baradei, que destacó en reiteradas ocasiones el trabajo de la organización que dirige. El Premio Nobel de la Paz también respalda la forma de trabajar de la AIEA, ya que pone de manifiesto que cuenta con un "enorme apoyo público", destacó El Baradei, que agradeció el trabajo de todos sus compañeros del organismo de Naciones Unidas que dirige. "Espero que continuemos el duro camino que tenemos ante nosotros" en cuanto al desarme nuclear y la lucha contra la proliferación de armas atómicas, añadió.
Para El Baradei, que recientemente ha sido reelegido por unanimidad por los miembros de la Junta de Gobernadores de la AIEA para un tercer mandato de cuatro años, la concesión del galardón fue una auténtica sorpresa, ya que no había recibido con anterioridad llamada alguna del Comité Nobel. En tono distendido, el director general de la AIEA aseguró que se enteró de la concesión del premio por televisión y que lo primero que hizo fue besar emocionado a su mujer que le acompañaba.