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El juez Ismael Moreno decidirá si la reciente sentencia del Constitucional permite procesar a Castro

El juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, será el encargado de determinar si debe ser admitida a trámite o no la querella por genocidio presentada el viernes pasado por la Fundación Nacional Cubano Americana contra Fidel Castro. En 1998 se desestimó una querella similar al entender que las víctimas debían ser españolas para investigar los hechos. Pero una reciente sentencia del Tribunal Constitucional permite a la Justicia española perseguir los delitos de genocidio con independencia de la nacionalidad de las víctimas.

El juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, será el encargado de determinar si debe ser admitida a trámite o no la querella por genocidio presentada el viernes pasado por la Fundación Nacional Cubano Americana contra Fidel Castro. En 1998 se desestimó una querella similar al entender que las víctimas debían ser españolas para investigar los hechos. Pero una reciente sentencia del Tribunal Constitucional permite a la Justicia española perseguir los delitos de genocidio con independencia de la nacionalidad de las víctimas.
L D (Europa Press) La querella fue presentada el pasado viernes por los delitos de genocidio, crímenes contra la humanidad, torturas y terrorismo, contra el dictador cubano, Fidel Castro; su hermano, el general de Ejército Raúl Castro; y los ex ministros del régimen castrista Osami Cienfuegos y Carlos Amat.
 
La demanda ha correspondido al Juzgado Central de Instrucción número 2, porque su titular fue el magistrado que estudió el caso con anterioridad, es decir, cuando se presentó la primera querella contra el régimen castrista en noviembre de 1998. Esta iniciativa de la Fundación Nacional Cubano Americana fue archivada entonces por la Audiencia Nacional al entender que el Tribunal Supremo, cuando revisó el genocidio del pueblo maya, impuso la condición de que las víctimas fueran españolas para investigar los hechos denunciados.
 
Precisamente, la querella presentada el pasado viernes por la Fundación y trece ciudadanos cubanos recuerda la sentencia del Tribunal Constitucional que permite a la jurisdicción española perseguir los delitos de genocidio con independencia de la nacionalidad de las víctimas.
 
No obstante, hasta ahora la Audiencia Nacional siempre ha mantenido la inmunidad de los jefes de Estado y de Gobierno en ejercicio, y la Fundación Nacional Cubano Americana pide que se ordene la detención, vía Interpol, de los querellados, entre los que se encuentra Fidel Castro, en cualquier país al que se desplacen.
 
Entre 15.000 y 17.000 fusilamientos, además de torturas de todo tipo
 
La querella afirma que desde que Castro llegó al poder, el 8 de enero de 1959, comenzó "todo un mecanismo de represión de los derechos fundamentales y libertades públicas", mediante "la implantación de un terror revolucionario" a cuyo servicio se pusieron a trabajar varios organismos, como el Departamento de Seguridad del Estado, llamado la "Gestapo roja", el Ministerio del Interior, la Dirección General de Inteligencia y la Unidad Militar de Ayuda a la Producción, entre otros.
 
La Fundación describe el sistema de encarcelamiento del régimen y las principales cárceles del país. "En 1978 había en Cuba entre 15.000 y 20.000 presos políticos –afirma la querella–. Hoy el Gobierno reconoce la existencia de entre 400 y 500 presos políticos. Según Amnistía Internacional, en 1997 había en la isla entre 980 y 2.500 presos políticos. Desde 1959 más de 500.000 cubanos han pasado por los campos y centros de represión."
 
Otro apartado de la demanda interpuesta es el de fusilamientos, cifrados entre 15.000 y 17.000 durante la dictadura castrista. Además, se mencionan formas de tortura como la de privación del descanso y el sueño, alterar las horas de las comidas, utilizar insectos propios de la falta de higiene y obligar a los reclusos a desnudarse y formar filas en las que deben juntar sus cuerpos hasta provocar el contacto de las partes genitales.
 

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