L D (Europa Press) Rajoy acudió este jueves a petición propia a la Cofradía del Cava de Sant Sadurní d'Anoia, una de las principales regiones vitivinícolas catalanas, para dar un espaldarazo al sector, tras haber "empezado a ver muchas cosas por Internet" llamando al boicot de estos productos, y haber captado "cierta inquietud en muchos sectores". El cava ya sufrió un boicot en la Comunidad de Madrid después de que Carod Rovira se manifestara en contra de la candidatura de la capital para los Juegos Olímpicos.
Mariano Rajoy quiso diferenciar su postura sobre el proyecto estatutario de su opinión sobre Cataluña y sus productos. Así, subrayó que va "a dar la batalla contra el Estatuto, porque es malo para los catalanes, y también contra quienes promuevan boicots contra productos hechos por personas que se están ganando la vida muy dignamente". Insistió en que "el cava, y todos los productos catalanes, son tan españoles como los que se producen en el resto de España, el jamón de jabugo o el turrón de Alicante". Es más, insistió en que "los corchos de las botellas de cava vienen de Extremadura y las botellas, de Vitoria y de Andalucía".
Por todo ello, pidió "a todos los que quieran hacerme caso", que "consuman los productos según les guste o no, y no atendiendo a su origen" geográfico, ya que "no hay que confundir la disputa política con la actividad normal de ciudadanos normales". Rajoy rechazó cualquier posible acusación de que la campaña contra el Estatuto que promueve el PP haya podido alentar sentimientos anticatalanes porque "es una campaña en defensa de algo que hemos votado todos, que es la Constitución", para que el texto catalán se tramite como una reforma constitucional.
Agradecimiento de los empresarios
El líder popular, acompañado del presidente del PP catalán, Josep Piqué, se reunió por espacio de media hora con el presidente del Consejo Regulador del Cava, Gustau Garcia Guillamet; del Instituto del Cava, Magí Raventós; de la propia Cofradía del Cava de Sant Sadurní, Pere Bonet, y de Freixenet, Josep Lluís Bonet. Tras departir con ellos en una bodega, brindó con una copa del cava producido en la propia Cofradía. El presidente de Freixenet aseguró que aún no han percibido ningún descenso de las ventas, pero confesó que "el sector está inquieto y preocupado" por que "nos involucren en cosas que no son las nuestras". Por ello, agradeció como a "cualquier responsable político que tenga la sensatez de decir que no tiene nada que ver la discusión política sobre una norma jurídica como es el Estatuto de Cataluña con la normalidad económica y social dentro del país".
Mariano Rajoy insistió después de defender los productos catalanes de posibles boicots en el impacto económico que el texto puede tener. Rajoy señaló que el Estatuto es especialmente "malo" para los "agentes económicos". El presidente del PP señaló el Estatuto "rompe la unidad de mercado" en un momento en que la Unión Europa se esfuerza por homologar las distintas normativas, denunció que "jamás había visto un texto más intervencionista en la economía y en la vida de las personas como éste". Rajoy destacó que el Estatuto nombra 127 veces las palabras 'promover', 'intervenir' y 'planificar', frente a las 20 que lo hace la Constitución.