España acaba quinta en la Supercopa de Europa tras derrotar a Alemania (28-27)

L D (EFE) España no tuvo opción de defender el título después de las derrotas encajadas ante Francia (26-28) en el debut y frente a Suecia (24-32). El conjunto que dirige Juan Carlos Pastor quedó relegado a disputar este quinto puesto de consolación que le enfrentó nada menos que al actual campeón de Europa. El equipo español sufrió hasta el último minuto para ganar a Alemania y al menos arrancar esa inyección de moral que supone saber que puede superarle con vistas al Europeo.

Tanto David Barrufet, en la cancha hasta los diez primeros minutos de la segunda parte, como José Javier Hombrados, que cubrió la portería hasta el final, se erigieron en los mejores hombres del combinado español. La seguridad de ambos bajo palos fue lo que mantuvo viva a España hasta la conclusión del choque que fue de infarto. Después de marcharse al descanso con empate 16-16, España fue a remolque en el marcador hasta que faltaban poco más de cinco minutos para el final cuando Albert Rocas logró neutralizar el marcador (25-25) con un lanzamiento de penalti.

Un lanzamiento posterior de David Davis (25-26), ayudado por dos grandes intervenciones de Hombrados colocó a España por encima por primera vez durante toda la segunda mitad. España se complicó la vida en la siguiente acción cuando un contraataque alemán fue interceptado por Raúl Entrerríos con una acción que le ocasionó la expulsión con tarjeta roja y un lanzamiento desde los siete metros para Alemania. Hombrados paró el penalti, pero un error en la selección de lanzamiento de Iker Romero, seguido del acierto de Klimovets volvió a nivelar el marcador (26-26).

Alemania se quedó en inferioridad a falta de tres minutos por una acción sobre Romero y Rocas aprovechó la acción de ataque a pase de Mariano Ortega y después de que Hombrados volviera a abortar un lanzamiento de Klimovets. Rocas aumentó la ventaja (26-28) y Alemania tan sólo logró por medio de Zeitz acercarse a falta de 21 segundos (27-28). Esta fue prácticamente la dinámica de todo el partido en el que España también comenzó por debajo en el marcador (2-0), pero consiguió endosar un parcial de 6-0 para colocarse 3-7.

La puntería de Iker Romero y Jon Belaustegui y el acierto bajo los palos de Barrufet en el tercer parcial propiciaron una ventaja de tres goles (5-8). España trabajó con una defensa 5-1 efectiva que junto a la fluidez de su ataque le permitió ir por delante. La selección nacional mostró un juego más fluido cuando optaba por buscar a sus laterales en ataque y se decidía por los lanzamientos exteriores ante la presionante retaguardia 6-0 que plantaron los teutones. Alemania sacó buen rendimiento de la rápidas transiciones de defensa a ataque, que le valió albergar esperanzas en los primeros lances de la segunda mitad con los contraataques que culminó el bielorruso nacionalizado alemán Klimovets.