L D (EFE) Habrá ganas en la Ciudad Condal para ver al equipo de Frank Rijkaard. Además el rival invita al espectáculo, un conjunto necesitado de la victoria que, como el Barça, ofrece un fútbol espectacular y promedia tres goles por encuentro en la Bundesliga. Los azulgrana van lanzados en Europa y en la liga española. Han encontrado su mejor fútbol tres meses después del inicio de la competición y sus posibilidades son infinitas. Liderados por un gran Ronaldinho, con los goles de Eto'o y el influjo del novato Messi, el Barcelona tiene una gran oportunidad para certificar la primera plaza del grupo al abrigo de su público, aprovechando la ola a favor de su fútbol, un juego que enamora en todo el mundo.
El brasileño intentará desbancar a David Trezeguet de la clasificación de máximos goleadores (ambos llevan 4), en el partido 49 de Liga de Campeones de Puyol y en el 74 de Xavi Hernández. Históricamente al Barcelona se le da bien el Werder. En la ida, los azulgrana ganaron 0-2 y en los dos anteriores enfrentamientos, correspondientes a la Supercopa europea de 1993, los catalanes ganaron en casa (2-1) y empataron fuera (1-1).
El "ensayo general" del Werder Bremen para el partido de mañana contra el Barcelona fue más que exitoso y terminó con un contundente 6-1 ante el Wolfsburgo, que incluso hubiese podido encajar más goles de no haber sido por varias buenas paradas de su meta Simon Jentzsch. Los dos hombres que más se han destacado en el Bremen últimamente, el goleador Miroslav Klose y el centrocampista Tim Borowski, a quien en Alemania ya algunos llaman "el otro Ballack", volvieron a ser clave en la goleada ante el Wolfsburgo.
A Barcelona, el Bremen llegan con optimismo y una intención declaradamente ofensiva pese al respeto innegable que se le tiene al Barcelona. El delantero croata Ivan Klasnic sigue siendo baja pero el paraguayo Nelson Valdez lo ha suplido con eficacia en los últimos compromisos. Los problemas del Bremen siguen estando en la parte defensiva, en buena parte por la agresividad que suele tener el equipo para buscar la portería contraria que muchas veces le hace descuidar la retaguardia.
El brasileño intentará desbancar a David Trezeguet de la clasificación de máximos goleadores (ambos llevan 4), en el partido 49 de Liga de Campeones de Puyol y en el 74 de Xavi Hernández. Históricamente al Barcelona se le da bien el Werder. En la ida, los azulgrana ganaron 0-2 y en los dos anteriores enfrentamientos, correspondientes a la Supercopa europea de 1993, los catalanes ganaron en casa (2-1) y empataron fuera (1-1).
El "ensayo general" del Werder Bremen para el partido de mañana contra el Barcelona fue más que exitoso y terminó con un contundente 6-1 ante el Wolfsburgo, que incluso hubiese podido encajar más goles de no haber sido por varias buenas paradas de su meta Simon Jentzsch. Los dos hombres que más se han destacado en el Bremen últimamente, el goleador Miroslav Klose y el centrocampista Tim Borowski, a quien en Alemania ya algunos llaman "el otro Ballack", volvieron a ser clave en la goleada ante el Wolfsburgo.
A Barcelona, el Bremen llegan con optimismo y una intención declaradamente ofensiva pese al respeto innegable que se le tiene al Barcelona. El delantero croata Ivan Klasnic sigue siendo baja pero el paraguayo Nelson Valdez lo ha suplido con eficacia en los últimos compromisos. Los problemas del Bremen siguen estando en la parte defensiva, en buena parte por la agresividad que suele tener el equipo para buscar la portería contraria que muchas veces le hace descuidar la retaguardia.
Rijkaard da descanso a Xavi y Messi
Xavi Hernández y Leo Messi, dos de los titulares el sábado en el Santiago Bernabéu, junto al delantero Maxi López, se han quedado fuera de la lista del Barcelona para el partido de mañana de Liga de Campeones frente al Werder Bremen. El técnico Frank Rijkaard ha dado descanso así a Xavi y Messi, mientras que la ausencia de Maxi se justifica en su posible cesión en el mercado invernal y en la imposibilidad que tendría de jugar en Europa de alinearse con el conjunto azulgrana.
El partido ante el Werder Bremen apunta así a oportunidades para habituales suplentes. Las novedades son las de Santiago Ezquerro y Juliano Belletti, recuperado este último de una lesión. La lista de convocados es la formada por Valdés, Jorquera, Puyol, Iniesta, Edmílson, Sylvinho, Oleguer, Deco, Giuly, Belletti, Larsson, Motta, Eto'o, Gabri, Van Bronckhorst, Ronaldinho, Márquez y Ezquerro.
El técnico barcelonista, Frank Rijkaard ,explicó que había conversado con los jugadores suplentes y que les había explicado la situación "de la mejor manera posible", aunque advirtió que, en cualquier caso, no les queda "más que aceptarlo". "Lo bueno es que, ahora viene otro partido y una nueva oportunidad para algunos jugadores que están con ganas de participar", manifestó el holandés.
Entre los jugadores con los que ha conversado Frank Rijkaard figura el argentino Maxi López, con posibilidades de abandonar el club en el mercado invernal, "aunque todavía no está decidido". También se refirió Rijkaard al riojano Santiago Ezquerro, del que dijo que es "uno de esos jugadores que siempre se está preparando para cuando le llegue su ocasión".
El técnico barcelonista, cuestionado sobre las críticas que había recibido por su gestión de la plantilla con las rotaciones que impuso a inicios de temporada, dio irónicamente las gracias "a la prensa, porque esos comentarios siempre se pueden usar como una motivación añadida". Frank Rijkaard, contrariamente a la rutina que mantiene las vísperas de partido, programó el entrenamiento de este lunes a puerta abierta. "No tenemos nada que esconder", señaló al respecto Rijkaard, quien escogió como escenario de la sesión el campo de La Masía para preservar el césped del Camp Nou, donde se ejercitó el Werder Bremen.
Pese a todas estas decisiones, el holandés negó que sus jugadores, ya clasificados para la siguiente ronda de Liga de Campeones, puedan relajarse mañana. "Tenemos mucho respeto por el Werder Bremen, un equipo que siempre ha obtenido buenos resultados contra otros clubes españoles y que, en su último partido de Liga, marcó seis goles. Además, no se puede subestimar a nadie en Europa, donde el nivel es muy alto", detalló el entrenador del Barcelona.
Frank Rijkaard intuye un marcador con muchos tantos, al destacar la mentalidad ofensiva de ambos conjuntos, y advirtió por último a sus jugadores de la necesidad de mantener la concentración tras la victoria del sábado, "porque queda mucha temporada y hay que jugar contra muchos rivales que te pueden complicar la vida".
Entre los jugadores con los que ha conversado Frank Rijkaard figura el argentino Maxi López, con posibilidades de abandonar el club en el mercado invernal, "aunque todavía no está decidido". También se refirió Rijkaard al riojano Santiago Ezquerro, del que dijo que es "uno de esos jugadores que siempre se está preparando para cuando le llegue su ocasión".
El técnico barcelonista, cuestionado sobre las críticas que había recibido por su gestión de la plantilla con las rotaciones que impuso a inicios de temporada, dio irónicamente las gracias "a la prensa, porque esos comentarios siempre se pueden usar como una motivación añadida". Frank Rijkaard, contrariamente a la rutina que mantiene las vísperas de partido, programó el entrenamiento de este lunes a puerta abierta. "No tenemos nada que esconder", señaló al respecto Rijkaard, quien escogió como escenario de la sesión el campo de La Masía para preservar el césped del Camp Nou, donde se ejercitó el Werder Bremen.
Pese a todas estas decisiones, el holandés negó que sus jugadores, ya clasificados para la siguiente ronda de Liga de Campeones, puedan relajarse mañana. "Tenemos mucho respeto por el Werder Bremen, un equipo que siempre ha obtenido buenos resultados contra otros clubes españoles y que, en su último partido de Liga, marcó seis goles. Además, no se puede subestimar a nadie en Europa, donde el nivel es muy alto", detalló el entrenador del Barcelona.
Frank Rijkaard intuye un marcador con muchos tantos, al destacar la mentalidad ofensiva de ambos conjuntos, y advirtió por último a sus jugadores de la necesidad de mantener la concentración tras la victoria del sábado, "porque queda mucha temporada y hay que jugar contra muchos rivales que te pueden complicar la vida".