(Libertad Digital) El presidente del Gobierno ha vuelto a ser desautorizado por uno de sus ministros. Rodríguez Zapatero anunció el pasado día 21 de noviembre, durante unas jornadas organizadas por “The Economist”, que el Ejecutivo tenía la intención de reducir el tipo del Impuesto de Sociedades hasta el 25 por ciento en el caso de las pymes y al 30 por ciento para el resto de las empresas. Dos días después, el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, rebajaba las expectativas de la reforma del Impuesto de Sociedades al situarla en un horizonte temporal de 3 a 5 años.
Ahora, Fernández Ordóñez ha afirmado que únicamente se acometerá la rebaja de cinco puntos en el tipo del 35%, si se recortan las deducciones, ya que, de lo contrario, esta rebaja supondría una pérdida de recaudación de 4.000 millones de euros y "seríamos suicidas” si lo hiciéramos. Según informa la agencia Europa Press, el secretario de Estado ha dejado claro que la idea es mantener las denominadas “deducciones técnicas”, como las aplicadas por doble imposición o por fondos de inversión, pero eliminar el resto o bien alargar el plazo temporal sobre el que se aplicará la reforma, para que el impacto recaudatorio no sea tan grande. "Si no somos capaces de reducir las deducciones, habrá que bajar menos el impuesto de lo anunciado o extender la reforma más en el tiempo", ha afirmado.
Repartir las deducciones de los propietarios de vivienda a los inquilinos
Según Fernández Ordóñez, su departamento está estudiando también la posibilidad de repartir las actuales deducciones de las que disfrutan los propietarios de vivienda, y que en algunos casos pueden llegar al 50 por ciento, con los inquilinos de dichas viviendas, para favorecer el alquiler. La idea es "partir el beneficio entre el propietario y el inquilino" ya que, por un lado, se favorecería fiscalmente el alquiler y, por otro, el inquilino estaría interesado en declarar a Hacienda dicho pago, por lo que fiscalmente se controlarían mejor estas operaciones, muchas de ellas ocultas al fisco.
Sin embargo, el secretario de Estado ha insistido en que la deducción por adquisición de vivienda habitual se mantendrá prácticamente como está ahora (un 15 por ciento sobre 9.000 euros, con carácter general), ya que, en opinión de Fernández Ordóñez, se trata de una forma de ahorro y también de un complemento a las pensiones públicas de jubilación en caso de necesidad. En este sentido, ha admitido que la "hipoteca inversa" (una renta anual a cambio de la vivienda tras el fallecimiento del propietario) es un "acierto" porque supone un auténtico complemento para las pensiones. No obstante, ha reconocido que es "muy complicado" llevarlo a la práctica y sería necesario introducir "alguna corrección" en el caso de la muerte temprana del propietario.
Planes de pensiones para clases medias
En lo que respecta a las pensiones, Fernández Ordóñez ha anunciado que se introducirán cambios en las deducciones por planes de pensiones para favorecer especialmente a las rentas medias, que son, según dijo, las que sufren una mayor diferencia entre el salario y la pensión de jubilación. De esta forma, ha apuntado que la idea es que los límites de las aportaciones a planes de pensiones se acerquen a la situación que tienen otros países europeos, ya que ahora en algunos casos este límite puede alcanzar los 42.000 euros anuales, máximo del que sólo pueden disfrutar las rentas más altas. "Se trata introducir un sistema superbeneficioso para que realmente aparezcan pensiones complementarias privadas y, para ello, concentraremos los beneficios fiscales en las clases medias", ha afirmado.
Junto con la reordenación de las principales deducciones, Fernández Ordóñez ha adelantado también que la reforma del IRPF combinará la reducción de tipos con el alargamiento de tramos de renta sobre los que se aplican dichos tipos. "Ahora aplicamos los tipos en tramos relativamente bajos. Habrá que hacer un mix de las dos cosas: rebajar tipos y extender tramos", ha indicado Fernández Ordóñez, tras señalar que el tipo marginal mínimo, situado en el 15%, se modificará debido al "cambio importante" que se introducirá en el impuesto para mejorar la equidad.
Preguntado sobre si la fiscalidad de las plusvalías se mantendrá tal y como está (gravadas al 15% las que se generan a más de un año), señaló que la "guía del 15% habrá que tenerla en cuenta porque cambiar las expectativas sobre este tema sería muy complicado", aunque ha eludido concretar si finalmente se mantendrá este porcentaje o si se incrementará hasta el 18% como también baraja Hacienda.