El diario cita fuentes confidenciales y cercanas a la investigación que han guardado "celosamente" los detalles de la exacta localización, momento de la agresión y los detalles de la misma para no perjudicar las indagaciones de este nuevo suceso, ya que las coincidencias con las anteriores agresiones hacen sospechar de los mismos autores.
El ataque ocurrió a los pocos días de celebrarse una manifestación de protesta convocada por las asociaciones de vecinos del barrio, alarmados tras las dos agresiones anteriores ocurridas los días 16 y 20 de diciembre de 2005.
En el primero de los casos, tres jóvenes abordaron a una joven de 14 años sobre las 18.00 horas en la calle Mateo Seoane Sobral, fue conducida al Parque del Mediodía, donde marcaron una esvástica a la joven en el glúteo. La víctima en esta ocasión describió a los agresores como tres "cabezas rapadas".
La segunda agresión ocurrió cuando otra joven fue abordada cerca de su casa sobre las 20.00 horas y, en este caso, la denuncia se refiere a un grupo de jóvenes con el rostro oculto, quienes marcaron la cruz gamada a la víctima en la espalda.
Así, estos últimos hechos hace sospechar a los investigadores de acciones de un grupo mejor organizado de lo que cabía esperar en un principio y ya se baraja la posibilidad de una banda radical de carácter ultraderechista, más experta de lo esperado. Su fin sería crear inseguridad en el barrio en una clara intención de terrorismo urbano de "baja intensidad, propio de los grupos afines a los denominados crímenes de odio", indica el diario.
Las mismas fuentes citadas por el rotativo señalan que no debe caerse en alarma social, ya que éste es el objetivo de los atacantes, y aseguran que las indagaciones están bien centradas y prosigue la acumulación de pruebas en contra de varios sospechosos. Sin embargo, los mismos actúan de manera extremadamente precavida para eludir las acciones de la Policía Nacional, que en estos momentos dedica "abundantes medios" de vigilancia e investigación.
Una de las posibilidades atribuye la autoría de los hechos a tres individuos residentes en el barrio de Delicias, donde el pasado mes de agosto, en la calle Sargento Provisional, tres personas marcaron a una joven una esvástica en el brazo. En aquel caso, la víctima también describió a los tres jóvenes "con la cabeza rapada".
La vigilancia de los agentes habría provocado la decisión de que estos individuos cambiaran el escenario de sus agresiones y, el provecho de acudir a Parquesol consiste en que pueden moverse cerca del Parque del Mediodía, una extensa zona verde que cubre la elevación del barrio hasta la Avenida de Salamanca. Además, bordea una zona frecuentada por los jóvenes en su tiempo de ocio y de estudio, al situarse cerca el Instituto Julián Marías.