L D (EFE) José Bono compareció el martes en el Congreso, casi seis meses después de la tragedia, a petición propia. Lo hizo ante la Comisión de Defensa, donde presentó el informe final sobre el accidente Cougar que se estrelló en Afganistán el 16 de agosto, en el que murieron 17 militares. Ese informe señala como posibles causas una maniobra agresiva a poca altura, así como el perfil de "vuelo de riesgo", y las condiciones meteorológicas y orográficas adversas
Tras explicar el informe elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes, el ministro de Defensa afirmó que en la gestión del accidente no se ocultó nada y "siempre hemos dicho la verdad". En este sentido, aseguró que desde el accidente hasta hoy el Ministerio de Defensa ha actuado con "transparencia" y "rigor", y "siempre hemos dicho la verdad" a las familias para "no aumentar su dolor, con torpezas".
Subrayó el rigor de la investigación y puntualizó que entre otras cuestiones se han estudiado minuciosamente los restos de los helicópteros siniestrados, analizado meticulosamente los resultados de las autopsias, consultado con testigos, contrastadas las indagaciones y entrevistados los tripulantes. También, agregó Bono, se ha constatado que los pilotos habían pasado los reconocimientos médicos y cumplían todos los requisitos para volar, y que los helicópteros llevaban todo en regla.
El ministro leyó el informe de la Comisión de Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), que descarta un ataque exterior, un fallo del aparato, el choque entre las dos aeronaves o la explosión de su munición. El documento señala como posibles causas una maniobra agresiva a poca altura del suelo, así como el perfil de "vuelo de riesgo", y las condiciones meteorológicas y orográficas adversas. Bono concluyó, pues, que no existe una causa única del accidente, sino un conjunto de factores adversos, y afirmó que se ha hablado de la investigación "más de lo debido" y se han dicho al respecto "disparates, sin fundamento".
Bono aseguró que culpar a los pilotos sería ir más allá de la Comisión de Investigación y añadió que eran los mejores pilotos del Ejército. En este contexto, indicó que el capitán Guitar tenía en su haber 500 horas de vuelo y el brigada Morales más de 1.600. Ambos tenían una "elevada experiencia" y en los últimos seis meses habían acumulado más horas que la media de sus compañeros.
El ministro también informó de que el accidente del segundo Cougar se produjo al realizar una maniobra agresiva tras ver el humo del impacto del otro aparato y creer que se trataba de un ataque. Sin embargo, la pericia de los pilotos evitó una tragedia, según dijo el ministro.
Tras explicar el informe elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes, el ministro de Defensa afirmó que en la gestión del accidente no se ocultó nada y "siempre hemos dicho la verdad". En este sentido, aseguró que desde el accidente hasta hoy el Ministerio de Defensa ha actuado con "transparencia" y "rigor", y "siempre hemos dicho la verdad" a las familias para "no aumentar su dolor, con torpezas".
Subrayó el rigor de la investigación y puntualizó que entre otras cuestiones se han estudiado minuciosamente los restos de los helicópteros siniestrados, analizado meticulosamente los resultados de las autopsias, consultado con testigos, contrastadas las indagaciones y entrevistados los tripulantes. También, agregó Bono, se ha constatado que los pilotos habían pasado los reconocimientos médicos y cumplían todos los requisitos para volar, y que los helicópteros llevaban todo en regla.
El ministro leyó el informe de la Comisión de Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), que descarta un ataque exterior, un fallo del aparato, el choque entre las dos aeronaves o la explosión de su munición. El documento señala como posibles causas una maniobra agresiva a poca altura del suelo, así como el perfil de "vuelo de riesgo", y las condiciones meteorológicas y orográficas adversas. Bono concluyó, pues, que no existe una causa única del accidente, sino un conjunto de factores adversos, y afirmó que se ha hablado de la investigación "más de lo debido" y se han dicho al respecto "disparates, sin fundamento".
Bono aseguró que culpar a los pilotos sería ir más allá de la Comisión de Investigación y añadió que eran los mejores pilotos del Ejército. En este contexto, indicó que el capitán Guitar tenía en su haber 500 horas de vuelo y el brigada Morales más de 1.600. Ambos tenían una "elevada experiencia" y en los últimos seis meses habían acumulado más horas que la media de sus compañeros.
El ministro también informó de que el accidente del segundo Cougar se produjo al realizar una maniobra agresiva tras ver el humo del impacto del otro aparato y creer que se trataba de un ataque. Sin embargo, la pericia de los pilotos evitó una tragedia, según dijo el ministro.