L D (Europa Press) Si alguien aceptara un pago a los terroristas, indicó Mariano Rajoy en su discurso en Roma, estaría convirtiendo el terrorismo en "un instrumento político". Afirmó que "no hay nada por encima de la Ley y la Ley es la expresión de la voluntad de la mayoría". "Quien ose mercadear con el Estado de Derecho se comporta como un enemigo de la UE", insistió el líder de la oposición.
Además, en el discurso arremetió contra la izquierda afirmando que "ha sido derrotada y ha renunciado al esfuerzo intelectual que significa asumir su derrota". Aseguró que, más bien, "ha optado por orientarse en función de los vientos de lo políticamente correcto, imponiendo un modelo de relativismo social que no fortalece a nuestras sociedades sino que las debilita al justificar desde el ejercicio del poder la premisa de que todo tiene un precio, de que el fin justifica los medios".
Inmigración, nacionalismo económico y crisis europea
En su intervención, el líder del PP se refirió también a la Constitución Europea al afirmar que el Tratado, que fue rechazado en referéndum en Francia y Países Bajos, "no se puede aprobar por partes". Rajoy recordó que su partido apoyó el referéndum celebrado en España "a pesar de no estar de acuerdo con el punto del reparto de poderes, al que cedió el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero". Por ello, ahora "es inaceptable" que se intente salvar sólo algunas partes del texto, "y encima la que se quiere aprobar es justo la del reparto de poderes".
Rajoy tocó también el tema de la inmigración durante su intervención, de la que dijo que es "el reto y el problemas más importante de la UE". Comentó el caso español, donde en 10 años se pasó del 2,4 por ciento de extranjeros en la población a casi el 10 por ciento. "La inmigración es el gran reto y tenemos que apostar por una política común en materia de inmigración. Veinticinco países pueden tener mucha más eficacia que uno o unos cuantos".
Además, en su discurso ante los líderes del PPE Rajoy atacó el nacionalismo económico "que levanta barreras artificiales contra la libertad y el mercado único" y recordó que "la UE está fundada en la libertad de circulación y el mercado único". "Porque creemos en estos fundamentos tenemos que rechazar cualquier política que quiera levantar barreras artificiales contra la libertades y el mercado único. Nuestro deber es ensanchar y no bloquearla con nuestros temores nacionales. Nuestra obligación es unir fuerzas e impedir que el nacionalismo económico hipoteque el futuro de todos los europeos", agregó en referencia a las medidas de varios gobiernos europeos para frenar fusiones transnacionales.
Mientras el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha dejado clara su apuesta por los "campeones nacionales" en sectores estratégicos, Rajoy replicó que "los campeones nacionales están muy bien para el fútbol, pero Europa tiene que saber que la gran liga del futuro se juega en el mundo entero y solo con una libertad interior podemos proyectarnos al exterior y tener éxito en la gran final". Además, advirtió de que "no habrá protección social ni atenderemos a los más débiles si no hay un proceso de reformas económicas continuadas".
El PPE respalda a Rajoy
Las palabras de Rajoy llamando a no "mercadear" con el Estado de Derecho han tenido su respuesta en un documento, denominado "Manifiesto de Roma", aprobado por unanimidad en el Congreso que el PPE celebra en la capital italiana. El Partido Popular Europeo considera que las "sociedades libres" no deben pagar un precio político a los terroristas que decidan abandonar las armas y que el extremismo y el terrorismo deben combatirse "con decisión".
"Nuestras sociedades libres no pueden aceptar la idea de que se debería pagar un precio político a los terroristas para que abandonen sus actividades criminales", señala el documento, que sigue la línea programática de la declaración aprobada en Bruselas por los líderes del PPE el pasado 23 de marzo, un día después del anuncio de alto el fuego de ETA, pero no hace una referencia específica al grupo terrorista vasco.