(Libertad Digital) El Málaga puede certificar esta semana su descenso a la Segunda División, aunque su rival, el Racing de Santander, no parece el más propicio para darle el pasaporte al equipo andaluz. El conjunto cántabro estrena entrenador, Nando Yosu, después de la dimisión la pasada jornada de Manolo Preciado. Es la recta final del campeonato y todos los partidos tienen su punto de morbo. Otro encuentro al rojo vivo es el que enfrenta al Betis y al Athletic, dos pesos pesados del fútbol español que pasan por una época de vacas flacas.
El Real Madrid no puede dejarse los tres puntos en el Reyno de Navarra. López Caro ha dicho que eso sería “un mazazo”, pero el Osasuna quiere seguir soñando con la Champions, algo que tiene al alcance de la mano. Ambos mirarán de reojo al Valencia, que este domingo se ve las caras con el Alavés. Los de Quique Sánchez Flores también tienen que ganar por una doble razón: para evitar el alirón del Barcelona y para mantener la segunda posición, que da acceso directo a la Liga de Campeones.
En la lucha por la UEFA, el Deportivo y el Celta protagonizan un derbi regional que ha levantando altas expectativas. Ninguno tiene asegurado su puesto en Europa la temporada que viene y los tres puntos les impulsarían hacia ello. El Getafe recibe al Villarreal, un equipo tocado tras su reciente eliminación de la Liga de Campeones. No era el objetivo de los madrileños a principios de temporada, pero a medida que ha avanzado la campaña, se han ido viendo con posibilidades, todo lo contrario que su rival, que se jugó todo a una carta, la final de París, y ahora ve cómo sus opciones se esfuman.