LD (EFE) En una conferencia de prensa realizada en Berlín, la organización Médicos sin Frontera han denunciado que diez mil personas han huido de los enfrentamientos entre el Ejército chadiano y los movimientos opositores al presidente Idris Deby, en el poder desde 1990.
El grupo afirma que entre los desplazados hay muchos sudaneses que llegaron a Chad hace tres años, huyendo del conflicto que ya entonces se vivía en Darfur, y que los desplazamientos forzados amenazan con recrudecer la crisis humanitaria que vive la zona, la mayor del mundo.
Deby está acosado por la rebelión que protagoniza en el este del país el Frente Unido para el Cambio (FUD), liderado por dirigentes de la oposición, antiguos jefes militares que desertaron de las Fuerzas Armadas e incluso algunos de sus parientes. El FUD se estableció en una zona fronteriza con la belicosa región de Darfur, área en la que en su día se refugiaron unos doscientos mil sudaneses. Chad acusa a Sudán de estar detrás del movimiento rebelde
En tanto, el ministro sudanés de Justicia, Mohamed Ali al-Mardi, minimizó la importancia del informe del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, sobre supuestas masacres masivas en la convulsa región sudanesa de Darfur. "Ese informe habla del pasado ya que no ha tenido en cuenta los cambios que se han dado en Darfur tras la firma del acuerdo en la ciudad nigeriana de Abuya, en mayo pasado, que puso fin a tres años de violencia y violaciones", subrayó en una rueda de prensa.