LD (EFE) En una comparecencia ante el Parlamento de su país, el ministro de Defensa timorense, José Ramos-Horta, aseguró al Parlamento que los cerca de seiscientos policías internacionales desplegados en Dili han conseguido dominar la situación en la capital, azotada durante las últimas semanas por una ola de violencia.
El anuncio de Ramos-Horta se produce un día antes de que el Consejo de Seguridad de la ONU decida sobre la prórroga para otro mes de la misión de la Oficina de la ONU en Timor Oriental (UNOTIL), y cuando también la organización mundial debe determinar el despliegue de una fuerza policial en este país asiático.
Ramos-Horta, quien es también ministro de Asuntos Exteriores, declaró ante el Parlamento que ha pedido de forma oficial a la ONU que investigue la reciente ola de violencia, que causó la muerte de unas treinta personas en Dili. Entre los incidentes ocurridos en abril y mayo, que Ramos-Horta dijo que ha pedido que se investiguen, figura el más sangriento de los registrados en la ciudad capital, cuando una decena de policías desarmados que se estaban rindiendo fueron tiroteados por el Ejército.