(Libertad Digital) Juan José Imbroda resume las bazas de Melilla: un régimen fiscal especial, con bonificaciones del 50% en el IRPF y el Impuesto de Sociedades; un "privilegiado régimen arancelario"; un "completo programa de ayudas a la inversión", y una "estratégica situación, en la entrada del Mediterráneo".
La campaña Melilla a un salto, presentada este miércoles en Madrid, descubre el atractivo turístico e inversor de una ciudad autónoma que Imbroda define como "la gran desconocida". El objetivo de la campaña es que los españoles capten "la verdadera imagen" de la ciudad, que, a juicio del presidente autonómico, está "retorcida por prejuicios o estereotipos". Melilla, dice el presidente melillense, "no quiere ser la ciudad olvidada, la del patio trasero y remarcó la "prefecta convivencia" entre los melillenses, "independientemente de su cultura o religión".
Los beneficios "económicos y fiscales" que tiene esta ciudad constituyen uno de sus grandes atractivos para los inversores, así como que, desde el punto de vista económico, ha crecido más que la media nacional, y que el turismo, de mayo de 2005 a mayo de 2006 ha aumentado en "un 21%".
La promoción económica de Melilla descansa en la sociedad pública PROMESA (Proyecto Melilla SA). Su presidente, José María López Bueno, explica que la entidad "ha contribuido a generar más de 2.000 empleos directos en cerca de mil empresas de todos los sectores mediante la gestión de subvenciones y ayudas por valor de 10 millones de euros".
Con una población de 68.016 personas, el coste laboral por empleado es de 20.416 euros al año en Melilla, frente a la media nacional de 23.183 euros por empleado y año.
La ciudad Autónoma cuenta con un programa de ayudas a la inversión con fondos europeos aplicados a su condición de región Objetivo 1. Las ayudas pueden llegar al 40% de la inversión, o del 55%, en el caso de las pymes. Se conceden ayudas a las empresas con empleo estable, a la competitividad, al fomento de la actividad empresarial de la mujer, a la contratación de desempleados en sectores definidos previamente como prioritarios, así como líneas específicas de microcréditos para los residentes.
La ciudad está en un "punto importante de despegue", destaca el presidente Imbroda, y quiere contar cómo es realmente. "No queremos ser los olvidados, los del rincón, los del patio trasero", explica.
Por eso y para seguir atrayendo visitantes, la ciudad ha puesto en marcha su campaña para cambiar una imagen que a veces ha estado distorsionada "por estereotipos y tópicos lejos de la realidad cotidiana".
Esta es, hoy en día, la de "una sociedad pujante, que avanza", que ya ha superado la media nacional en indicadores como renta bruta familiar o PIB per cápita, que puede lograr en breve la convergencia con la UE y en la que conviven en armonía las comunidades cristiana, musulmana y judía.