L D (EFE) Sobre el duelo ante Baghdatis, el zurdo español rechazó que se hubiera tratado de un enfrentamiento sencillo. "Ha sido un partido duro, aunque quizá el primer set no fue tan difícil, pero los otros dos sí fueron complicados", observó. Aseguró que ante su oponente chipriota, el dieciséis en el ránking mundial, jugó "con mucha concentración, con una motivación increíble".
Preguntado por la final del domingo, ante el que fue su rival en Roland Garros, Nadal comentó que al helvético "sólo le venzo a veces" y advirtió de que "ésta es su superficie". Sí, aseguró, que en el gran encuentro en la pista central "trataré de jugar el mejor partido de mi carrera".
Preguntado por la final del domingo, ante el que fue su rival en Roland Garros, Nadal comentó que al helvético "sólo le venzo a veces" y advirtió de que "ésta es su superficie". Sí, aseguró, que en el gran encuentro en la pista central "trataré de jugar el mejor partido de mi carrera".
Al llegar al vestuario, Nadal se echó a llorar
Tras lograr alcanzar la final de Wimbledon, los nervios le hicieron "morirse por dentro" y admitió que al llegar al vestuario se puso llorar. "Estadísticamente, es más difícil llegar aquí a una final, que ganar Roland Garros y no me lo esperaba, ni mucho menos", reconoció el tenista balear, que llegó a Londres tras haber ganado, por segundo año consecutivo el Abierto de Francia, ante Federer, su próximo rival. Reiteró que para él, verse en la final del torneo más importante de hierba del mundo constituye "un sueño".
Nadal reconoció que jugó con "más nervios de lo normal" y confesó que, aunque estuvo "muy serio" durante todo el partido, al llegar al vestuario se puso a llorar. "Me moría por dentro y al llegar al vestuario me he puesto a llorar de los nervios. Para mí es un sueño estar aquí, siempre lo he visto muy lejos", reveló. Habló de su oponente en la final, el suizo Roger Federer, un jugador al que se ha enfrentado en siete ocasiones en el pasado, 6 de las cuales se resolvieron a favor de Nadal. Además, el mallorquín ganó los últimos cinco duelos contra Federer, cuatro de los cuales fueron Finales disputadas este año.
Pese a su ventaja en los partidos frente al helvético, Nadal subrayó que afrontaría dicho enfrentamiento consciente de que él era "inferior". "Yo sé que soy inferior a él. No tengo ninguna duda y ninguno de los que estáis aquí -dijo, en alusión a los periodistas- la tenéis". Ante esto, Nadal, que destacó la importancia de afrontar el partido del domingo "con buena mentalidad", indicó que tendría que "trabajar" para intentar "no ser tan inferior e igualar el partido". Tal y como indicó nada más eliminar a Baghdatis aseguró que trataría de jugar "el mejor partido" de su vida ante Federer.
"Tengo que llegar ahí, primero, sabiendo que es muy difícil y segundo, estando mentalizado de que lo puedo conseguir, aunque él es el favorito, mucho más que nunca", dijo. Comentó, con su simpatía habitual, que durante el duelo con el chipriota se le escapó un "come on", en uno de los puntos, y explicó el que le saliera la frase en otro idioma, "porque -dijo- ya pienso en inglés y últimamente me sale el 'come on". Sobre la hazaña de haberse metido en una final de Wimbledon, algo que ningún otro español lograba desde 1966, cuando lo hizo Manolo Santana, para vencer al estadounidense Dennis Ralston, el zurdo de Manacor observó: "Evidentemente, es mucho más difícil llegar aquí. Esto hay que valorarlo y saber que he hecho algo que es muy difícil y ojalá que no pase tanto tiempo para que otro español lo consiga. Estoy muy feliz y no me esperaba esto".
Sobre la explicación a su buen torneo, el español simplemente observó que "las cosas se han hecho bien y he encarado el torneo con buena mentalidad". "Es una sorpresa que esté yo en esta Final pero he jugado muy bien, el mejor torneo del año", señaló. Preguntado si su madre y su tío Miguel Angel Nadal vendrían a verle jugar ante Federer, dijo: "Yo si fuera ellos, vendría, porque no creo que sea fácil que vuelvan a tener esta oportunidad". Lo que dejó claro Nadal es que ante el número uno del mundo, intentará "hacer algo y al menos -dijo- hacerle sentir la presión".
Nadal reconoció que jugó con "más nervios de lo normal" y confesó que, aunque estuvo "muy serio" durante todo el partido, al llegar al vestuario se puso a llorar. "Me moría por dentro y al llegar al vestuario me he puesto a llorar de los nervios. Para mí es un sueño estar aquí, siempre lo he visto muy lejos", reveló. Habló de su oponente en la final, el suizo Roger Federer, un jugador al que se ha enfrentado en siete ocasiones en el pasado, 6 de las cuales se resolvieron a favor de Nadal. Además, el mallorquín ganó los últimos cinco duelos contra Federer, cuatro de los cuales fueron Finales disputadas este año.
Pese a su ventaja en los partidos frente al helvético, Nadal subrayó que afrontaría dicho enfrentamiento consciente de que él era "inferior". "Yo sé que soy inferior a él. No tengo ninguna duda y ninguno de los que estáis aquí -dijo, en alusión a los periodistas- la tenéis". Ante esto, Nadal, que destacó la importancia de afrontar el partido del domingo "con buena mentalidad", indicó que tendría que "trabajar" para intentar "no ser tan inferior e igualar el partido". Tal y como indicó nada más eliminar a Baghdatis aseguró que trataría de jugar "el mejor partido" de su vida ante Federer.
"Tengo que llegar ahí, primero, sabiendo que es muy difícil y segundo, estando mentalizado de que lo puedo conseguir, aunque él es el favorito, mucho más que nunca", dijo. Comentó, con su simpatía habitual, que durante el duelo con el chipriota se le escapó un "come on", en uno de los puntos, y explicó el que le saliera la frase en otro idioma, "porque -dijo- ya pienso en inglés y últimamente me sale el 'come on". Sobre la hazaña de haberse metido en una final de Wimbledon, algo que ningún otro español lograba desde 1966, cuando lo hizo Manolo Santana, para vencer al estadounidense Dennis Ralston, el zurdo de Manacor observó: "Evidentemente, es mucho más difícil llegar aquí. Esto hay que valorarlo y saber que he hecho algo que es muy difícil y ojalá que no pase tanto tiempo para que otro español lo consiga. Estoy muy feliz y no me esperaba esto".
Sobre la explicación a su buen torneo, el español simplemente observó que "las cosas se han hecho bien y he encarado el torneo con buena mentalidad". "Es una sorpresa que esté yo en esta Final pero he jugado muy bien, el mejor torneo del año", señaló. Preguntado si su madre y su tío Miguel Angel Nadal vendrían a verle jugar ante Federer, dijo: "Yo si fuera ellos, vendría, porque no creo que sea fácil que vuelvan a tener esta oportunidad". Lo que dejó claro Nadal es que ante el número uno del mundo, intentará "hacer algo y al menos -dijo- hacerle sentir la presión".