L D (EFE) El equipo español pudo con los argentinos pese a la baja de Gasol, que sólo participó en los siete primeros minutos del choque. Con todo, España llegó a tener una máxima ventaja de veintitrés puntos (57-34) y fue superior a un rival de mucho crédito que, tampoco hay que olvidarlo, apenas ha completado quince días de preparación. La falta de tensión que el equipo nacional tuvo al principio frente a Polonia se transformó en un exceso de ganas en el arranque contra el cuadro albiceleste. España defendía bien, pero desperdiciaba tiros fáciles y los argentinos lo supieron aprovechar, sobre todo el pívot de los Spurs de San Antonio Fabricio Oberto.
Los once primeros puntos del choque cayeron en la cesta a través de los hombres interiores. Oberto firmó diez de los catorce anotados por su equipo en el cuarto inicial, que terminó con una pequeña diferencia de tres puntos a favor del conjunto español (17-14). La distancia era corta y, además, Pau Gasol había tenido que dejar la cancha a los ocho minutos con problemas en la espalda. España, sin embargo, había defendido bien y casi sin faltas -tres-. Oberto anotó el 17-16 para elevar su cuenta a doce puntos en tanto que los exteriores seguían sin aparecer en ataque. Carlos Delfino hizo el empate a diecinueve (m.13) y la selección española se puso en zona en los albores del despegue al que dio forma entre el final del segundo cuarto y el inicio del tercero.
El marcador saltó de un 22-22 a un 29-22 (m.17) y, a continuación, a un 39-28 (m.19). La presión defensiva, muy eficaz para la recuperación de balones, asentó a los hombres de José Vicente Hernández. España se había embalado a través del sacrificio defensivo y las salidas al contragolpe. El intermedio no afectó al ritmo local. Alex Mumbrú soltó la muñeca para clavar dos triples seguidos que llegaron al mentón de Argentina (51-34 m.24). Juan Carlos Navarro también se sumó a la fiesta (57-34 m .25) sin que Gasol pudiera presenciarlo. No volvió de los vestuarios tras el descanso y se quedó en manos del doctor del equipo nacional, Delfín Galiano, por culpa de un golpe en la zona lumbar mientras luchaba por un rebote. El partido se había acabado para él.
España supo desenvolverse sin la participación del ala-pívot de los Grizzlies de Memphis. Argentina sólo pudo anotar dieciséis puntos en el tercer cuarto (62-47) y eso, gracias a un repunte en el epílogo del tramo. La defensa siguió siendo la clave del equipo nacional en el último cuarto. Pero el combinado albiceleste apretaba. Los veintitrés de diferencia máxima habían descendido a once (66-55) a más de siete minutos para la bocina. Entretanto, la rotación de 'Pepu' Hernández movía mucho a los hombres exteriores, a los que quería frescos para oponerse al potente perímetro suramericano.
Este ha sido el primer partido amistoso que puede servir como orientación para los dos selecciones. Eso sí, los dos técnicos dejaron cosas en el tintero y, también hay que tenerlo en cuenta, la preparación de ambos aún debe completarse. Lo que apuntan promete. España se alzó con la victoria después de fases de gran efectividad ofensiva y de una nota media en defensa de notable. Argentina lleva muy poco tiempo de preparación y está algo más verde. En cualquier caso, es la actual campeona olímpica. Los dos equipos volverán a verse la próxima semana en Singapur y seguro que habrán dado una vuelta de tuerca más en su estado de forma.