LD (EFE) La radio pública israelí ha confirmado la muerte de tres miembros de Hezbolá a manos de soldados de su país. El tiroteo tuvo lugar en la localidad de Shama, situada en el sur del Líbano, a cuatro kilómetros al norte de la frontera. Según los militares, los chiíes pusieron en peligro su vida y por este motivo les dispararon. No se informó si los terroristas presentaron resistencia.
El incidente tuvo lugar al entrar en su octavo día el alto el fuego entre Israel y el Líbano, conforme a la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU. Según el texto aprobado, los soldados israelíes deben retornar a la frontera internacional cuando el Gobierno central de Beirut, con una fuerza de quince mil efectivos, tome el control en el sur del país con la ayuda de otros 15.000 hombres de una fuerza ampliada de la ONU (FINUL) en el Líbano.
Desde que entró en vigor el alto el fuego, soldados israelíes mataron a doce terroristas de Hezbolá que, por su parte, no llevó a cabo ninguna operación de represalia hasta la fecha y generalmente lo respetan, según fuentes militares israelíes. En cambio, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, acusó a Israel de violar el alto el fuego el sábado pasado a raíz de una operación de comandos en Baalbek, lo que las autoridades explicaron como una acción para impedir un contrabando de armas para los terroristas proiraníes.
El enviado de Annan para el Líbano, Terje Roed-Larsen, indicó este lunes en Jerusalén a la ministra israelí de Exteriores, Tzipi Livni, que en lugar de lanzar esa operación militar, su país debió recurrir a canales diplomáticos para impedir esa supuesta transferencia de armas, prohibida por la resolución 1701 del Consejo de Seguridad.