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Mueren las 169 personas que viajaban a bordo del avión ruso estrellado en el este de Ucrania

Un avión de pasajeros ruso Tu-154 se ha estrellado este martes con 169 personas a bordo en el este de Ucrania, donde los servicios de emergencia locales trabajan en la recuperación de los cadáveres, según informó el Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia. "El avión cayó a 45 kilómetros al norte de Donetsk", dijo la portavoz de ese Ministerio Irina Andriánova, quien señaló que equipos de rescate ucranianos se encuentran en el lugar del siniestro. En el avión viajaban 39 niños que regresaban de sus vacaciones a San Petersburgo. La causa del siniestro fue una tormenta eléctrica en la que el avión se vio envuelto. Las autoridades han confirmado la muerte de todos los pasajeros.

Un avión de pasajeros ruso Tu-154 se ha estrellado este martes con 169 personas a bordo en el este de Ucrania, donde los servicios de emergencia locales trabajan en la recuperación de los cadáveres, según informó el Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia. "El avión cayó a 45 kilómetros al norte de Donetsk", dijo la portavoz de ese Ministerio Irina Andriánova, quien señaló que equipos de rescate ucranianos se encuentran en el lugar del siniestro. En el avión viajaban 39 niños que regresaban de sus vacaciones a San Petersburgo. La causa del siniestro fue una tormenta eléctrica en la que el avión se vio envuelto. Las autoridades han confirmado la muerte de todos los pasajeros.
L D (EFE) "A las 15.37 hora de Moscú (11.37 GMT) la tripulación envió un mensaje de S.O.S. y dos minutos más tarde el avión desapareció de las pantallas de los radares", añadió Andriánova.
Una tormenta eléctrica y no un ataque terrorista, como en un principio se pensó, fue la causa de que el avión ruso con 171 pasajeros se estrellara confirmó la portavoz del servicio de emergencias ruso. "El ataque terrorista está descartado. Fuentes ucranianas han comunicado que el avión se vio envuelto en una tormenta eléctrica", apuntó Andriyanova.   La televisión rusa 'Channel One' dijo, citando fuentes ucranianas, que el avión se prendió fuego en el aire, a una altura de 10.000 metros, y la tripulación decidió realizar un aterrizaje de emergencia después de emitir una señal de socorro. Los servicios ucranianos de emergencias confirmaron a la televisión rusa que una fuerte tormenta eléctrica pudo haber causado el accidente.

La aeronave hacia el vuelo entre el balneario ruso de Anapa, en el mar Negro, y la ciudad de San Peterburgo, y en él viajaban 169 personas, de los que 10 eran tripulantes y 159 pasajeros, entre ellos 39 niños de hasta doce años de edad que regresaban de sus vacaciones a San Petersburgo para el inicio del año escolar.

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