(Libertad Digital) El máximo responsable del PP en Barcelona ha denunciado en La Mañana de la COPE el desprecio mostrado por Zapatero hacia los barceloneses. Primero, ha explicado Alberto Fernández Díaz, porque se han enterado de que tendrán un nuevo alcalde por decisión del Gobierno central. Segundo, porque han visto cómo se ha confirmado que Zapatero "está más pendiente de intentar subsanar los propios errores de su gestión y la del alcalde aunque sea infringiendo las reglas". El dirigente popular se ha quejado de que Barcelona tenga nuevo alcalde por decisión del presidente del Gobierno y no por decisión de lo ciudadanos.
La salida de Clos, ha apuntado, era previsible desde el punto de vista del interés general, no así su destino al frente del Ministerio de Industria. Sin embargo poco antes de que comenzara el verano el propio alcalde negó que fuera a dejar la Alcaldía. Respondía así a una pregunta concreta del PP, que ya sospechaba que el relevo llegaría en torno a las fiestas de La Merced. Por entonces se han producido todos los cambios trascendentales en el Ayuntamiento.
De alcalde a ministro por interés electoral
También ha recordado que Clos "no tiene experiencia para dirigir un Ministerio de Industria" y ha reconocido que "le debería desear la buena suerte que no ha tenido en Barcelona por el bien de España". Pese a esto, insiste en que "es inaceptable que el fracaso de un alcalde se convierta en el principal aval para ser ministro. Demuestra que Zapatero cambia alcaldes y ministros por interés de partido y no por el interés general al que debería plegarse todo gobernante".
Del que será el nuevo alcalde, Alberto Fernández Díaz ha señalado que "la carta de presentación es precisamente el balance del fracaso de la gestión de Clos". Lo es porque "el fracaso de Clos es la propia gestión de Jordi Hereu". Hasta ahora era el máximo responsable de la seguridad ciudadana "y de que Barcelona se haya convertido en el referente en toda España del incivismo y de la presencia de grupos radicales". Su labor como concejal está también marcada por la multiplicación de los parquímetros.
El PP reclama que relevo se produzca cuanto antes "porque Barcelona no puede tener un Gobierno paralizado". Lleva así meses, ha denunciado Fernández Díaz, y se agrava "con la parálisis en Cataluña, primero por el Estatuto y ahora por las elecciones autonómicas".