L D (EFE) Según Gravesen, Capello dijo incluso recientemente a medios españoles que el Madrid contaba con dos porteros, Diego López y Bodo Illgner: "Se olvidó de que tenemos a Casillas y que Bodo ya no está en el club, a mis ojos es un arrogante y un egoísta".
El internacional danés dice también en la entrevista, cuyo contenido adelantaba el diario BT , que el club blanco se equivocó al ficharlo, porque buscaba un jugador de características distintas. "No sé qué vieron en mí, pero no soy un especialista defensivo, al menos yo no me veo así. Debían haber fichado a Lee Carsley, que jugaba por detrás de mí en el Everton. Aunque claro que estoy muy contento de que se equivocaran", declara.
Gravesen también ha tenido palabras para sus ex compañeros, que califica de "increíblemente hábiles" en el campo, pero recuerda que algunos son iconos mediáticos y eso dificulta que se concentren en el fútbol. "Es fantástico jugar con alguno de ellos cuando quieren, pero el equipo se partía a veces porque sólo había tres que corrían. Si uno es superestrella y cobra más que nadie tiene que ir el primero al frente, y ellos no lo hacían. A veces se comportaron como unos mierdas", afirma el jugador.
El futbolista aclara que en la pelea con Robinho en pretemporada él no había pegado al brasileño, sino que fue éste quien le atacó. "Le hice dos entradas, sí, pero eso es fútbol, no le quedaron moratones. Perdió el balón, me golpeó y me dio patadas y yo fui a por él, así reacciono. Se puede decir que fue mejor que no lo agarrara, o que fue una pena, pero mirando atrás, casi mejor no haberlo agarrado", confesaba. El jugador del Celtic acusa a los medios de mostrar sólo las imágenes en las que persigue a Robinho y asignarle el papel de malo. "Sé que la televisión del Madrid tiene imágenes del episodio, pero no las muestran. ¿Por qué no? Es raro. Cada cual que piense lo que quiera", dice.
En su año y medio en la disciplina madridista, Gravesen resalta un recuerdo: cuando el Rey Juan Carlos bajó a saludar a los jugadores tras un partido de Liga de Campeones frente a la Juventus de Turín. "Eso demuestra lo grande que es el Madrid", concluye Gravesen, que destaca que cuando habla con los aficionados merengues , "generalmente me dicen que lo he hecho bien".
El internacional danés dice también en la entrevista, cuyo contenido adelantaba el diario BT , que el club blanco se equivocó al ficharlo, porque buscaba un jugador de características distintas. "No sé qué vieron en mí, pero no soy un especialista defensivo, al menos yo no me veo así. Debían haber fichado a Lee Carsley, que jugaba por detrás de mí en el Everton. Aunque claro que estoy muy contento de que se equivocaran", declara.
Gravesen también ha tenido palabras para sus ex compañeros, que califica de "increíblemente hábiles" en el campo, pero recuerda que algunos son iconos mediáticos y eso dificulta que se concentren en el fútbol. "Es fantástico jugar con alguno de ellos cuando quieren, pero el equipo se partía a veces porque sólo había tres que corrían. Si uno es superestrella y cobra más que nadie tiene que ir el primero al frente, y ellos no lo hacían. A veces se comportaron como unos mierdas", afirma el jugador.
El futbolista aclara que en la pelea con Robinho en pretemporada él no había pegado al brasileño, sino que fue éste quien le atacó. "Le hice dos entradas, sí, pero eso es fútbol, no le quedaron moratones. Perdió el balón, me golpeó y me dio patadas y yo fui a por él, así reacciono. Se puede decir que fue mejor que no lo agarrara, o que fue una pena, pero mirando atrás, casi mejor no haberlo agarrado", confesaba. El jugador del Celtic acusa a los medios de mostrar sólo las imágenes en las que persigue a Robinho y asignarle el papel de malo. "Sé que la televisión del Madrid tiene imágenes del episodio, pero no las muestran. ¿Por qué no? Es raro. Cada cual que piense lo que quiera", dice.
En su año y medio en la disciplina madridista, Gravesen resalta un recuerdo: cuando el Rey Juan Carlos bajó a saludar a los jugadores tras un partido de Liga de Campeones frente a la Juventus de Turín. "Eso demuestra lo grande que es el Madrid", concluye Gravesen, que destaca que cuando habla con los aficionados merengues , "generalmente me dicen que lo he hecho bien".