L D (Europa Press) Los medios consultados recordaron que, ante el anuncio de alto el fuego por parte de la banda armada, un número no significativo de escoltados, alrededor de una treintena, renunciaron a su servicio de protección en la comunidad vasca.
Sin embargo, la "incertidumbre" de los últimos momentos del proceso habría impulsado a reclamar los guardaespaldas a los que renunciaron. Desde ASES se apunta que, incluso se han solicitado alrededor de 25 ó 30 "nuevos servicios"
Las empresas privadas de protección personas tienen destinados en la comunidad vasca a unos 1.800 escoltas y a alrededor de 750 en Navarra, un número que no se ha reducido a fecha de hoy.
Paradójicamente también se han dirigido a la comunidad vasca y a Navarra unos 70 servicios de protección a mujeres maltratadas, un destino al que se pronosticaba que irían a parar los escoltas de ambas Comunidades. "Estamos con un frente totalmente abierto y otro que se está abriendo", señalaron.
Las fuentes citadas aseguraron que, desde hace semanas, los escoltas integrados en la asociación han extremado la precaución y, al margen de incrementar la contra-vigilancia, han variado los itinerarios habituales.