L D (Agencias) Entre los asistentes hubo muestras de dolor y condolencias por la pérdida, así como nuevos reconocimientos a la trayectoria política y personal de la ex ministra de Agricultura con el Gobierno Aznar y ex vicepresidenta de la Comisión Europea. Sus restos descansan en el País Vasco, la tierra de sus raíces, en el panteón que la familia tiene en la localidad guipuzcoana de Deba. Hasta allí fueron trasladados concluido el funeral oficiado por el párroco de Berriatua en una iglesia llena de amigos y familiares y a la que no accedieron los periodistas.
El oficio religioso se celebró pasada la una de la tarde, después del responso rezado por los más allegados en la ermita situada junto a la casa que la familia de Loyola de Palacio tiene en el cercano municipio vizcaíno de Marquina. El féretro, que fue portado, entre otros, por el ex ministro y ex presidente del Congreso, Federico Trillo, llegó a la iglesia cubierto por las banderas española, vasca y europa, que fueron entregadas a Ana Palacio.
Al funeral asistieron el presidente del PP, Mariano Rajoy; compañeros de la fallecida en el primer Gobierno del PP, encabezados por el ex presidente José María Aznar, que acudió con su esposa, Ana Botella, y otros dirigentes del partido, así como políticos de otras formaciones. Entre otros dirigentes populares, estuvieron Javier Arenas, Ángel Acebes, Eduardo Zaplana, Esperanza Aguirre, Isabel Tocino, Jaime Mayor Oreja, José María Michavila, Luisa Fernanda Rudí, Carlos Iturgaiz y María San Gil.
De otros partidos acudieron Josu Jon Imaz, Josu Erkoreka e Iñaki Anasagasti, por el PNV, el diputado Manuel Huertas y Rosa Díez del PSE-EE, la congresista Begoña Lasagabaster por EA y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, en representación del Ejecutivo. Otros asistentes fueron el alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso (PP), el presidente de Endesa, Manuel Pizarro y la concejala popular en el Ayuntamiento de Azcoitia Pilar Elías, viuda de Ramón Baglietto, asesinado por ETA.
La ex ministra fue enterrada a primera hora de la tarde en el cementerio guipuzcoano de Deba en un acto íntimo al que acudieron algunos de sus familiares, allegados y compañeros de partido. El féretro con los restos mortales de Loyola de Palacio llegó a las 14.30 horas al camposanto guipuzcoano, en el que se encuentra el panteón familiar. El féretro fue llevado a hombros desde el coche fúnebre, mientras un segundo coche funerario trasladó numerosas coronas de flores, que quedaron depositadas ante su tumba.
Tras una ceremonia religiosa de media hora, la hermana de la fallecida Ana Palacio recibió el pésame de los asistentes visiblemente emocionada. Los compañeros de partido de Loyola de Palacio volvieron a valorar la trayectoria y forma de ser de la ex ministra, que murió el miércoles en el Hospital Doce de Octubre de Madrid, cinco meses después de que le fuera diagnosticado un cáncer.
Mariano Rajoy puso de manifiesto que era "muy querida" por la militancia de su partido y por "muchos sectores más del País Vasco y del conjunto de España". En declaraciones a los periodistas en Marquina (Vizcaya), el presidente del PP destacó que se trataba de una "política de una enorme capacidad y que se sentía muy vasca y muy española". "Hemos venido a darle un último adiós, aunque siempre quedará en nuestros corazones, a esta tierra que siempre ha querido y donde será enterrada", dijo el presidente de los populares españoles.
El actual líder del PP de Andalucía, Javier Arenas, afirmó que los populares "estamos muy tristes y tenemos un gran vacío" al perder a una "buena compañera, buena amiga y un ejemplo de trabajo, capacidad y decisión". Por su parte, el eurodiputado del PP Carlos Iturgaiz destacó la personalidad de Loyola de Palacio, "siempre -dijo- a pie de tierra, trabajando y luchando por el País Vasco y por España y por su amor al PP". Iturgaiz puso de manifiesto que fue una mujer "íntegra, trabajadora, luchadora por la libertad", con "una forma de ser muy especial". Igual que "podía bajar a un campo y estar con los agricultores al lado de los olivos", se la podía ver "una semana después repartiendo bocadillos a los apoderados e interventores del PP" en mesas electorales, según puso como ejemplo el eurodiputado popular.
El oficio religioso se celebró pasada la una de la tarde, después del responso rezado por los más allegados en la ermita situada junto a la casa que la familia de Loyola de Palacio tiene en el cercano municipio vizcaíno de Marquina. El féretro, que fue portado, entre otros, por el ex ministro y ex presidente del Congreso, Federico Trillo, llegó a la iglesia cubierto por las banderas española, vasca y europa, que fueron entregadas a Ana Palacio.
Al funeral asistieron el presidente del PP, Mariano Rajoy; compañeros de la fallecida en el primer Gobierno del PP, encabezados por el ex presidente José María Aznar, que acudió con su esposa, Ana Botella, y otros dirigentes del partido, así como políticos de otras formaciones. Entre otros dirigentes populares, estuvieron Javier Arenas, Ángel Acebes, Eduardo Zaplana, Esperanza Aguirre, Isabel Tocino, Jaime Mayor Oreja, José María Michavila, Luisa Fernanda Rudí, Carlos Iturgaiz y María San Gil.
De otros partidos acudieron Josu Jon Imaz, Josu Erkoreka e Iñaki Anasagasti, por el PNV, el diputado Manuel Huertas y Rosa Díez del PSE-EE, la congresista Begoña Lasagabaster por EA y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, en representación del Ejecutivo. Otros asistentes fueron el alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso (PP), el presidente de Endesa, Manuel Pizarro y la concejala popular en el Ayuntamiento de Azcoitia Pilar Elías, viuda de Ramón Baglietto, asesinado por ETA.
La ex ministra fue enterrada a primera hora de la tarde en el cementerio guipuzcoano de Deba en un acto íntimo al que acudieron algunos de sus familiares, allegados y compañeros de partido. El féretro con los restos mortales de Loyola de Palacio llegó a las 14.30 horas al camposanto guipuzcoano, en el que se encuentra el panteón familiar. El féretro fue llevado a hombros desde el coche fúnebre, mientras un segundo coche funerario trasladó numerosas coronas de flores, que quedaron depositadas ante su tumba.
Tras una ceremonia religiosa de media hora, la hermana de la fallecida Ana Palacio recibió el pésame de los asistentes visiblemente emocionada. Los compañeros de partido de Loyola de Palacio volvieron a valorar la trayectoria y forma de ser de la ex ministra, que murió el miércoles en el Hospital Doce de Octubre de Madrid, cinco meses después de que le fuera diagnosticado un cáncer.
Mariano Rajoy puso de manifiesto que era "muy querida" por la militancia de su partido y por "muchos sectores más del País Vasco y del conjunto de España". En declaraciones a los periodistas en Marquina (Vizcaya), el presidente del PP destacó que se trataba de una "política de una enorme capacidad y que se sentía muy vasca y muy española". "Hemos venido a darle un último adiós, aunque siempre quedará en nuestros corazones, a esta tierra que siempre ha querido y donde será enterrada", dijo el presidente de los populares españoles.
El actual líder del PP de Andalucía, Javier Arenas, afirmó que los populares "estamos muy tristes y tenemos un gran vacío" al perder a una "buena compañera, buena amiga y un ejemplo de trabajo, capacidad y decisión". Por su parte, el eurodiputado del PP Carlos Iturgaiz destacó la personalidad de Loyola de Palacio, "siempre -dijo- a pie de tierra, trabajando y luchando por el País Vasco y por España y por su amor al PP". Iturgaiz puso de manifiesto que fue una mujer "íntegra, trabajadora, luchadora por la libertad", con "una forma de ser muy especial". Igual que "podía bajar a un campo y estar con los agricultores al lado de los olivos", se la podía ver "una semana después repartiendo bocadillos a los apoderados e interventores del PP" en mesas electorales, según puso como ejemplo el eurodiputado popular.
El Consejo de Ministros aprobó este viernes un real decreto por el que concede la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, a título póstumo, a Loyola de Palacio del Valle Lersundi.