Menú

EEUU y Panamá acuerdan un tratado de libre comercio

Al contrario de lo que sucede en Venezuela, Bolivia o Argentina, en Panamá el gobierno apuesta por la libertad y ha acordado con EEUU un Tratado de Libre Comercio (TLC) que reducirá los aranceles mutuos y facilitará los intercambios de bienes y servicios. Queda pendiente el capítulo laboral está sujeto a más negociaciones con el Congreso de EEUU. El acuerdo pone fin a unas conversaciones que comenzaron en abril del 2004, pero que se atrasaron principalmente por las diferencias sobre las normas fito y zoo-sanitarias que regulan la elaboración de alimentos.

L D (EFE) El Gobierno del istmo también quiso esperar a que se celebrara un referéndum sobre la expansión del Canal de Panamá. "El momento político debía ser el correcto para Panamá", dijo un alto funcionario de la Oficina de Comercio Exterior de EEUU (USTR, en inglés), quien no quiso ser identificado.

El TLC prevé la eliminación progresiva de la mayoría de los aranceles mutuos y otras barreras al comercio, así como el establecimiento de normas comunes de inversión y protección de la propiedad intelectual, entre otras medidas. Para Estados Unidos, el TLC abrirá nuevas áreas de negocio en Panamá en el sector de los servicios, que supone el 80 por ciento de la economía del país del istmo, y reducirá las tasas aduaneras que gravan sus exportaciones.

Panamá no necesita en realidad esa reducción en Estados Unidos, pues un 95 por ciento de sus productos actualmente no pagan aranceles al entrar en el país, gracias a varios programas de preferencias. Sin embargo, el TLC hará permanentes esas ventajas. Además, Panamá temía que sin un TLC con EEUU los flujos de inversión y comercio se desviarían a los países vecinos de América Central, que sí cuentan con un acuerdo de este tipo con Washington.

Para entrar en vigor, el TLC debe ser ratificado por los legislativos de ambos países. En Estados Unidos, la victoria de los demócratas en las elecciones de noviembre ha empeorado un clima de por sí adverso a los acuerdos comerciales. El partido de la oposición se queja de que los acuerdos que EEUU ha negociado con países latinoamericanos en los últimos años, incluidos los de Perú y Colombia, aún pendientes de ratificación, no protegen lo suficiente los "derechos de los trabajadores". Por ello, aunque este martes se anunció el fin de las negociaciones del TLC entre EEUU y Panamá, ese tema está aún por definirse. "Hemos alcanzado este acuerdo con el entendimiento de que está sujeto a conversaciones adicionales sobre trabajo" con el Congreso de EEUU, afirmó la Representante de Comercio Exterior, Susan Schwab, en un comunicado.

Schwab también dijo que el pacto dará oportunidades "significativas" a las empresas estadounidenses para participar en la ampliación del Canal de Panamá, un proyecto que costará 5.250 millones de dólares y que los panameños aprobaron en un plebiscito en octubre. El acceso de compañías estadounidenses a esos contratos ha sido uno de los obstáculos de las negociaciones, pues el Gobierno de Panamá no quería dar la impresión a sus conciudadanos de que "devolvía" el canal a Estados Unidos, según explicó una funcionaria del USTR, que pidió no ser identificada. El arreglo final ha sido reservar un 10 por ciento de esas obras para empresas panameñas.

En el tema de las medidas fito y zoo-sanitarias, Washington se había quejado de que las certificaciones panameñas no respondían a un proceso objetivo y predecible, sino que dependían de la discrecionalidad de los funcionarios de turno. Panamá se ha comprometido a fortalecer los controles en la elaboración de alimentos y ha reconocido la salubridad de las instalaciones estadounidenses, sin tener que avalarlas una por una. Estos compromisos se cimentarán en un acuerdo bilateral que ambas partes firmarán este martes en Washington.

La tercera área de discordia que quedaba pendiente en la décima ronda de negociaciones, que se inició a finales de la semana pasada, era el tratamiento de productos agropecuarios "sensibles". Para Panamá, el más delicado es el arroz. Según el TLC, el país del istmo permitirá la entrada de 11.000 toneladas adicionales al año de ese cereal y en el año 19 de aplicación del acuerdo, el comercio de ese alimento será totalmente libre. Para EEUU el punto flaco es el azúcar. El acuerdo aumentará la cuota exportadora de Panamá en 7.000 toneladas anuales, pero no habrá nunca libre comercio, según una funcionaria del USTR.

Temas

En Internacional

    0
    comentarios