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Ivano Balic destroza a Rusia y lleva a Croacia hasta la quinta plaza (34-25)

La selección de Croacia, vigente campeona olímpica, se ha hecho finalmente con la quinta plaza en el Mundial de balonmano de Alemania 2007, tras imponerse por un contundente 34-25 a Rusia, en un encuentro en el que los de Vladimir Maximov tan sólo pudieron aguantar durante veinte minutos el ritmo de los balcánicos.

L D (EFE) Pese a la ausencia de su gran estrella, el extremo del Celje Eduard Kokzharov, que se quedaba fuera de la convocatoria, el conjunto ruso lograba plantar cara en los minutos iniciales al talentoso equipo croata, gracias, sobre todo, al excepcional trabajo del pivote Mikhail Chipurin. Sin embargo, la inexistencia de lanzamiento exterior -algo extraño en un equipo plagado de 'cañoneros'- permitió ir poco a poco ahogando a los croatas el juego del pivote ruso, paso previo al despegue definitivo en el marcador de los balcánicos.

Fuga que llevó el sello del central Ivano Balic -no podía ser de otra manera-, que ha demostrando, tal y como ocurriera el jueves ante España, que la eliminación sufrida en los cuartos de final ante Francia, no le ha quitado las ganas de seguir demostrando que hoy por hoy es el mejor jugador del mundo.

Con el marcador con empate (10-10) a falta de diez minutos para la conclusión, el jugador del Portland San Antonio anotó dos decisivos goles consecutivos que permitieron a los de Lino Cervar abrir una pequeña brecha que ya no dejaría de crecer, ni al descanso (18-12), ni en la segunda mitad, en la que con el triunfo asegurado, los balcánicos dispararon la renta hasta el 34-25 final.

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